/ lunes 6 de noviembre de 2023

Democracia y debate | Un millón

Imagínate Hermosillo, devastado, si, imagina todo lo que conoces en esta ciudad de Hermosillo destruido, todo, absolutamente todo.

A ver vamos haciendo el ejercicio, seguro conoces la colonia Pitic, ahora imagínate que no queda ni una sola de las casas en pie, que todas están destruidas, puede ser que seas de esas personas que tienen cierto recelo de quienes viven en esa colonia y que digas (no me importa, ellos tienen dinero, seguro que se van a vivir a sus casas en Tucson).

Imagina ahora que todas, todas las casas de la colonia Valle Verde, han quedado también destruidas, todas las personas que ahí vivían ya no tienen casa donde vivir, no tienen que comer, no tienen agua para beber, no tienen nada, se han quedado sin nada.

Sigue imaginando, ahora piensa en el Barrio Mágico de Villa de Seris, ¿te acuerdas de la iglesia de la Candelaria?, pues ya no existe, ni la iglesia, ni ningún negocio de coyotas, tampoco queda casa en pie, comercio, no ha quedado piedra sobre piedra, los orgullosos colonos de este recién nombrado barrio mágico de Villa de Seris, no tienen donde vivir, tampoco tienen que comer, se han quedado sin nada.

Vamos ahora a La Manga, junto al aeropuerto, el cual por cierto ya no existe, La Manga tampoco existe ya, no hay casas, negocios, comercios, no hay nada. Vamos ahora, al bulevar Kino, ¿te acuerdas del hotel Fiesta Americana?, se ha caído, junto con él todos los que lo rodean, también los nuevos edificios de departamentos que se estaban construyendo. Todo se ha perdido.

Piensa en ese Hermosillo, donde no hay agua, luz, gas, teléfono, agua, comida, seguridad. Ese Costco que tanto odiabas, por las filas interminables para los pasteles, ha sido saqueado junto con el Soriana y todas las tiendas que existían en la antes bella Ciudad del Sol, que ahora es solo tristeza y destrucción.

Un millón, si \u0009un millón de personas que necesitan todo y de todo y de forma urgente, comida, medicinas, atención, educación, seguridad, todo se ha perdido, todo ha desaparecido.

¿Te imaginaste a Hermosillo devastado en su totalidad, con la totalidad de sus habitantes? Pues así está Acapulco.

Un millón de damnificados en Acapulco que además están solos, al Estado no le alcanza para ayudar, se entretiene más en pelear con otros que quieren hacerlo.

En otra realidad esta gran tragedia que viven en Guerrero, en Acapulco ya habría generado grandes y profundos cambios gubernamentales.

En México parece que un millón, no es suficiente.