/ lunes 30 de septiembre de 2019

Famosos a la parrilla | ¡Cariñito de mis amores! 

¡Majestuoso! ¡Único! e ¡Inolvidable! Así se define el concierto que Lila Downs ofreció el pasado sábado en la Ciudad del Sol, donde miles de personas corearon sin parar sus canciones y se deleitaron con ese estilo tan único y tan distintivo que tiene esta gran mujer.

Hablar de Lila es hablar de tradición, respeto, cultura y diversidad; es tan mística como el mole mexicano, tan auténtica como la gastronomía de nuestro país y tan poderosa como nuestro México.

Sus canciones son verdades, su presencia es orgullo y su música inspiración. ¡Qué grande eres Lila! Qué mujer, qué potencia vocal y qué dominio sobre el escenario. Al Chile, ¡Qué clase de concierto nos brindaste! Nadie se quedó sentido, nadie dejó de corear, de sentir ese “cariñito” y de amar en esa noche.

Sin dudarlo fue una noche de sorpresas, la Arena Sonora convertida en un espacio nuevo para eventos y que, creo yo, de ahora en adelante estará en la mira de grandes producciones, excelente lugar, limpio, acomodado, deslumbrante, con buena acústica y bien refrigerado.

Felicidades a sus organizadores, felicidades a Carmen Palacios, mujer distinguida y elegante, que con la clase que la caracteriza, atendió a Lila desde su llegada, le habló del amor que siente por Sonora y del compromiso adquirido en esta nueva encomienda, felicidades a todos los doctores que directa o indirectamente están apoyando esta fundación, a quienes desde el anonimato brindaron su tiempo, su talento y su dedicación, felicidades a Lila que desde hoy es la madrina de Miika, sin dudarlo será la voz que se necesita y la veremos muy participativa más pronto de lo que se imaginan.

Pero sobre todo felicidades a usted que asistió, que compró un boleto, que se tomó el tiempo de apoyar y que con ello ya está pensando en ser un donador de órganos. Felicidades Miika por demostrarnos que hay fundaciones con un deseo de ayudar ¡Gracias por este regalo de concierto!

Adiós a un grande

Y sin dudarlo este mes cierra de manera triste en la música con la partida de El Príncipe de la Canción José José, que deja un legado difícil de superar, deja un sinfín de canciones que perdurarán por la eternidad y nos deja a su gente, a sus fans un hueco en el corazón. Tuve la fortuna de conocerlo hace ya muchos años, de platicar con él muy de cerca y de expresarle mi admiración. Lo hice en Televisa México mientras descendíamos de un elevador, recuerdo que estaba acompañado de Danna, su asistente en ese momento y pese a su negativa, José José accedió a tomarse la foto del recuerdo, me habló de Sonora, le presumí la machaca y él me confesó que le gustaron más las coyotas, recordó a grandes sonorenses y habló de Rubén Lara, el mejor productor de teatro de todo México. Fue algo rápido, único e inolvidable, algo momentáneo, pero especial y la foto del recuerdo la tomó mi amigo inseparable y muy querido Fausto Ibarra, quien hoy desde luego le ha de tomar las fotos más espectaculares allá en el cielo donde seguramente los dos recordarán ese momento del que hoy yo les cuento. ¡Descansa en paz señor José José!

Gracias por leerme, les recuerdo mis redes sociales Facebook Famosos a la Parrilla /Instragram mkt78 /Twitter mayratorresk.