La pasión por preservar el patrimonio cultural escrito y visual del Noroeste de México dio vida a la colección privada de la familia Matiella Márquez que hoy conforma la Biblioteca del Septetrión, ubicada en Hermosillo.
Desde obras que datan de 1604 hasta aquellas asociadas con figuras como la escritora Sor Juana Inés de la Cruz, la actriz María Félix y el poeta Abigael Bohórquez, cada pieza es un tesoro que cuenta una parte esencial de la historia regional.
La biblioteca revela la fusión única entre la preservación cultural, el legado familiar y una sorprendente diversidad de expresiones artísticas. La meticulosa disposición del espacio, desde la mesa principal hasta las imágenes en las paredes y el baño, conmueve al espectador con la dualidad entre solemnidad académica y toques de creatividad.
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El espacio en su estructura misma narra historias: desde las fotografías familiares hasta las referencias históricas distribuidas en estanterías que tejen una narrativa que combina la formalidad del conocimiento con lo familiar. Sin embargo, este equilibrio se ve desafiado por la sorprendente irreverencia del baño, donde la sátira artística y la inesperada presencia de cabezas de vaca forradas con piedras de colores, obras de la artista visual Miriam Salado, contrasta con el resto del lugar.
La colección de la Biblioteca del Septetrión se integra por más de 6000 materiales que incluyen libros, documentos, manuscritos, partituras, así como fotografías, cartas y folletos originales que hablan sobre las diversas etapas de la historia de Sonora, Sinaloa, Arizona, Nuevo México, California y Baja California.
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