A inicios de esta semana trascendió la noticia del fallecimiento de Santos Valenzuela Neyoy, músico tradicional mayor del pueblo Yoreme-Mayo y quien fuera uno de los principales promotores de su cultura y unidad.
Empezó a tocar el tambor desde los siete años, iniciando así una pasión por la música que nunca dejó de lado a lo largo de su vida, interpretando los sones viejos de su pueblo a través del dominio de varios de sus instrumentos tradicionales.
A través de este arte, Santos Valenzuela Neyoy promovió la mitología yoreme, donde hay una relación estrecha entre el origen de los instrumentos y el orden del mundo y del cosmos.
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(En una de las historias sobre el origen del primer hombre mayo “se menciona que el pascola fecundó a la primera mujer, representada como arpa, mientras que el venado fue encargado de cuidar y alimentar a la tribu. Este mito relaciona el instrumento con lo femenino, la fertilidad y el origen del hombre mayo”, según se lee en el testimonio “La música del pueblo yoreme”, texto del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas).
En redes sociales varios de sus colegas y amigos lamentaron su fallecimiento al tiempo que recordaron el legado que dejó para varias generaciones de músicos y danzantes con quienes compartió sus conocimientos.
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Incluso el gobernador Alfonso Durazo compartió esta mañana sus condolencias, destacando que Santos Valenzuela Neyoy “fue un preservador y defensor de las cosmovisiones, usos, artes y costumbres de su pueblo”.
El ceremonial de cuerpo presente se realizó el pasado lunes 4 de diciembre en su domicilio de Buiyarumo, Huatabampo.
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