“Decía que el periodismo no era para mí”, cuenta en entrevista Judith Teresita León. “Caí sin querer en él y en la primera semana que estuve como reportera me llevé la nota de portada y fue como me di cuenta que de verdad sí me gustaba”.

Judith se inició en el periodismo en octubre de 2001, luego de su paso por la Licenciatura de Ciencias de la Comunicación en la Universidad de Sonora. Lo que pensó serían las bases para desenvolverse profesionalmente en la investigación y el manejo de personal, se convirtió en una vocación por contar historias de los cambios sociales, culturales y políticos de la ciudad que la vio nacer.

“Así he ido aprendiendo y desarrollándome y descomponiendo. En ese inter empecé a leer más y a conocer más autores, y a definir temas y géneros que me gustaban. Empecé a escribir más en forma”, señala quien ahora deja huella con sus historias en el semanario y en la página web de El Sol de Hermosillo.

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Con más de 20 años de trayectoria, Judith Teresita León le ha cedido la voz a los que no la tienen, rescatando a su vez momentos de la historia de una ciudad que ha pasado por múltiples cambios físicos y culturales.

“Hay lugares que desde antes de la pandemia desaparecieron, se los comió la modernidad y la cuestión económica. Y las herencias familiares de los negocios que quizás ya no eran redituables y la gente que no estaba involucrada en eso le perdió el cariño a lo que significaba”, apunta.

Sin embargo, la esencia del hermosillense sigue siendo la misma, dice convencida: personas generosas y empáticas que no dudan en asistir y cobijar a los otros.

“Aún es común encontrar a alguien que tú vas caminando y le preguntas una dirección y si no te acompañan te orientan bien hacia dónde están y con referencias que si no conoces aquí te dicen por dónde te vayas y llegas”.

En su faceta de escritora, Judith publicó “De ladrillo, concreto y asfalto”, la historia del Colegio de Ingenieros Civiles en Sonora y escrito en coautoría con el cronista de la ciudad Ignacio Lagarda.

Asimismo, textos suyos aparecen en compilaciones de cuentos de escritoras y entrevistas sobre periodismo, coordinados por las escritoras y periodistas sonorenses Margarita Oropeza (Antología I del Taller femenino de creación literaria) y de la maestra Norma Alicia Pimienta (de la serie Periodismo Escrito en Sonora).

En cuanto al periodismo sonorense escrito por mujeres y el papel del género en la sociedad, Judith afirma que aún hay camino por recorrer, con miles de historias que faltan por contar de las mujeres que en todos los ámbitos de la vida están contribuyendo a mejorar las sociedad en que se desenvuelven.

“Estamos en la tarea todavía de darnos a conocer, de cambiar el estilo de la narrativa, en lo que va surgiendo en torno al feminismo, asuntos de género. Leo cosas y descubro que tengo que transformarme yo también y evolucionar, y creo que estamos arando todavía para cosechar”.

Conversatorio “HMO, cuéntame tu historia”

En 2019, El Sol de Hermosillo inició el proyecto “HMO, cuéntame tu historia”, serie de entregas semanales que durante un año compilaron las vivencias y sucesos históricos de la “Ciudad del sol”, en viva voz de sus protagonistas.

Judith Teresita León colaboró con las historias “Un gallo bravo en la ciudad”, “Antonio Muro y el cincuentenario de la carne clasificada” y “Antes del Covid-19 existían las costumbres familiares: mi Día de San Juan”, las cuales se sumergen en sucesos que antes eran cotidianos en una ciudad que ya no existe.

“Antes el Día de San Juan, en los tiempos de mis abuelos, se acostumbraba comer sandía, vestirte de rojo, que era día de baño obligatorio, iniciaba el verano, entonces o llovía o te bañabas. Y son aspectos desconocidos para las nuevas generaciones y con los que las personas de más edad se pueden identificar y recordar que participaban en prácticas similares”.

El proyecto “HMO, cuéntame tu historia” destaca la importancia de rescatar la historia colectiva de la ciudad, contribuyendo a forjar una identidad y un sentido de pertenencia entre los hermosillenses. Algo que Judith conoce como pocos.

“Mis notas llaman a la nostalgia. Se me hace importante darle voz a temas que en otros medios u otras personas no le dan la importancia que tú sí. Me gusta participar en rescatar o mantener lugares, contribuir humildemente a que la gente vaya caminando por la ciudad y vaya caminando en dos planos: lo que ve y lo que hubo”.

Así, recuerda la periodista, su primer acercamiento con la lectura fue a través de las historietas de “Archie” y “La pequeña Lulú” que le compraban en su niñez en la antigua librería Librolandia, la cual continúa siendo una referencia para miles de hermosillenses y parte de su identidad cultural.

“Y todavía uno dice voy a tal parte, cerca de Librolandia, y hay gente que todavía sabe dónde es, aunque ya no esté ahí físicamente”.

En cuanto a la labor iniciada por el Sol de Hermosillo en el rescate de historias de la gente “de a pie”, y de los barrios y monumentos y costumbres de años anteriores, Judith destaca el esfuerzo de todos los involucrados por narrar las vivencias que han conectado con miles de lectores de todas las edades.

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El conversatorio “HMO, cuéntame tu historia” forma parte del programa oficial de las Fiestas del Pitic de este año, uniéndose a las celebraciones por los 323 años de la fundación de la ciudad el próximo viernes 26 de mayo en punto de las 18:00 horas en el Palacio de Gobierno.

Participan los cronistas Ignacio Lagarda Lagarda y Carlos Valenzuela Quintanar, al lado de los escritores Álex Cruz y la propia Judith Teresita León, bajo la moderación de Gabriela Salido, directora de El Sol de Hermosillo.

“Va a ser en un lugar muy bonito, que también tiene historia”, añade Judith”. “No sólo la que viene en los libros o en las publicaciones de medios, sino que alguna vez de niños o fuimos al grito o había una exposición o fuimos a conocer los murales. También es un lugar que forma parte de la historia personal de cada quien. Esperamos que de ahí surjan otras ideas que podamos difundir y ampliar de las personas que asistan y de lo que vaya surgiendo de ese conversatorio”.

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