El sábado 7 de octubre, las personas que transitaban por el Malecón Turístico de Guaymas se convocaron para ser la primera audiencia del 6to. Festival Tránsito en el Mar, que este año llevó el slogan Danzar desde la raíz.
El anfitrión fue el actor Ricardo Barreto invitando a los paseantes con megáfono en mano y desde lo alto de su personaje en zancos al más puro estilo de los espectáculos de calle. A ritmo de batucada el ensamble de percusión Bucketline integrado por Gerardo Aguilar, Alejandra Cazares, Dayra Fiol, Nezly Hernández, Jesús Mogo, Denisse Paredes, Ximena Robles, Alejandra Sepúlveda y el maestro Santiago Camacho, aportaron la música al recorrido y las gimnastas locales Alexa Godínez, Dana Godínez, Karen Márquez y Fernanda Sarabia dirigidas por Fancy Estudio Profesional de Danza, intervinieron el espacio con llamativas rutinas gimnásticas.
Ya convocada la audiencia y enmarcados por la belleza del atardecer en el puerto, el trío musical Flor de Lis integrado por Leonardo Lozano, Masiel Guzmán y Cesar González nos brindaron el soundtrack del momento con un delicioso sonido Bossa-nova para abrir paso a la presentación de las autoridades invitadas: María Elma Armenta, regidora propietaria en representación de Karla Córdova González, alcaldesa de Guaymas, Sonora, la maestra Rita Olivia Burgos coordinadora de Prevención del Delito Estatal, Jorge Palafox, coordinador de la región Guaymas y Empalme de la Secretaría de Seguridad Pública del Estado de Sonora, Jesús Madrid, coordinador de intervención de Espacios Públicos del Instituto Sonorense de Cultura, Jesús Camalich, coordinador del Conservatorio de Música Fray Ivo Toneck y por supuesto la creadora y directora de Tránsito en el mar, Ana Karina Loeza, agradeciendo el apoyo de las autoridades locales y federales y compartiendo la gran aportación para la realización de esta sexta edición por parte del Sistema de Apoyos a la Creación y Proyectos Culturales, así como del Estímulo Fiscal para la Cultura y las Artes del Estado de Sonora (EFICAS) con el apoyo de las empresas Grupo Vejar y Las Riberas.
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La primera pieza coreográfica fue una intervención- homenaje al recientemente desaparecido y querido miembro de la comunidad dancística nacional Maximiliano Corrales, quien durante la pasada edición del festival impartió el taller de danza contemporánea Protocolo de calle. Parte del material de dicho taller fue recreado con música de James Brown, por Manuel González, bailarín y coreógrafo egresado de la Licenciatura en Artes de la Universidad de Sonora, acompañado de los bailarines urbanos originarios de Guaymas, Karla Martínez, Paulina Parra y Carlos Robles.
El programa continuó con la coreografía Tijuana es una ciudad fronteriza, creada e interpretada por el bailarín Emiliano Castro, quien egresó hace 2 años de la Licenciatura en Artes Escénicas de la UNISON y actual integrante de la compañía Lux Boreal en Tijuana. El cielo, el mar, el impecable blanco del vestuario y el espacio, en contraste con la densidad de la presencia contundente del intérprete y la música, generaron de inmediato la atención y el silencio de las personas, que no tuvieron necesidad de una narrativa tradicional para identificarse con el peso en ocasiones infranqueable de la lucha por la sobrevivencia de la clase trabajadora de nuestro país, problemática a la que el coreógrafo se enfrentó durante el proceso de adaptación que experimentó para habitar la ciudad que ahora lo acoge.
La segunda participación estuvo a cargo del grupo Somos Escena, con la coreografía Rojo No. 9 de Aura Domínguez interpretada por la misma coreógrafa y la bailarina Miriam Marcor, propuesta escénica que surge a partir de una exploración lúdica de las diferencias entre dos corporalidades y que desemboca en una metáfora escénica en tono de comedia acerca de la intención de control por parte de uno de los personajes, sobre lo que la coreógrafa nombra como su niña interior.
Fancy Estudio Profesional de Danza que dirige Eyla Solorio, presentó Líquido, bloque de tres coreografías de estilo neoclásico creadas por la maestra Yssa Ochoa e interpretadas por estudiantes de los niveles, principiante, intermedio y avanzado. Es notable el nivel técnico, el compromiso y el poder de convocatoria de este centro formativo, “Bailen con el corazón” fue la última indicación que la directora dio al grupo, antes de entrar a escena.
Una de las ramas del arte escénico que cada vez se integra más a la propuesta escénica de festivales de danza y teatro en el país es el arte circense y Ramón Figueroa nos llevó a esa dimensión a través de la pieza Remedios de un payaso con la que rinde un tributo al circo de carpa, retomando actos clásicos del género con adaptaciones a piezas originales de su creación que corresponden al circo de calle y al teatro físico.
El cierre de esa primera tarde de festival se la llevó el Colectivo Danza Espontánea con las resonancias corporales de Natanael Barajas, Carlos Contreras, Carlos García, Ricardo Barreto, Ángel Nava, Saúl Medina y la conducción del dispositivo escénico a mi cargo (Claudia Landavazo), partimos de la pregunta ¿Cuál fue tu primera experiencia con el baile? Y fuimos tejiendo a través de la danza la historia colectiva de una narración a otra, por parte de una audiencia ávida de participación, acerca del gozo de bailar.
En el segundo día de actividades, en esta ocasión las presentaciones se concentraron por la tarde en las instalaciones del maravilloso edificio del Conservatorio de Música Fray Ivo Toneck, iniciando en el Foro al aire libre con la presencia de la compañía Margarita Danza Aquí y la coreografía Suma de Géneros del director David Barrón, recién estrenada en junio e interpretada por Ana Luisa Beltrán y Miguel Pro. Esta pieza parece ser el resultado de una deconstrucción del orden lógico de los elementos estéticos que desde la perspectiva del coreógrafo corresponden al género masculino por un lado y al femenino por otro, dicha estética se dibuja y se descubre a partir del juego de corporalidades intercambiables, la relación de los cuerpos en el espacio, las cadencias, los ritmos, hasta lograr un unísono construido de la combinación (la suma) de todos los elementos al inicio aparentemente aislados. Como regalo divino, la propuesta estuvo enmarcada baja la luz natural perfecta del atardecer, el cielo, el mar y las embarcaciones en movimiento que parecían dejarse llevar por la exquisita selección musical de la pieza (Peter Gregson, Julia Kent, Brambles, Dele Sosimi y Lalou).
La segunda pieza del programa fue Open Close Unipersonal de Julia Barrios e interpretada por Ali Salguero, talento hermosillense que emigró a la Ciudad de México y ahora regresa a compartirnos esta gozosa e interesante propuesta contemporánea creada en el 2016 y que se ubica en la línea de las Artes Vivas, de carácter performático, conceptual y en permanente desarrollo, en la que en cada presentación el público y al espacio se proponen, por parte de la directora, como co-creadores participativos, así en el juego de cerrar y abrir los ojos, nos van sorprendiendo imágenes inesperadas como que las personas sentadas a nuestro lado, de pronto, aparezcan en escena junto con la intérprete.
De nuevo al exterior gozamos como última propuesta del domingo, Carpa Mundi a cargo de Circuito Celebra, constituido por jóvenes talentos de los Talleres Libres y Licenciatura en Artes de la UNISON: Aneth López, Dayan Valdez, Dylan Carrillo, Lithay Mondragón, Maya Villa Palacios, Omar Ríos, Oscar Viamonte y Shylka Acuña bajo la dirección de la maestra Perla López Peñuelas.
Carpa Mundi es una recreación estética del circo tradicional, con base en el lenguaje de la danza, promueve la complicidad y participación de las infancias en el desarrollo de la escena, tejiendo exitosamente la relación entre el público y los personajes de culto del imaginario circense: El payaso, la contorsionista, la escapista, la malabarista, la encantadora de serpientes. Hay un objetivo en común, que logra con la intervención de la audiencia, vencer las confrontaciones entre adversarios y salvar a la tierra del amenazante impacto de un meteorito.
Continuando con las propuestas para las infancias, y aprovechando la gran afluencia dominical de paseantes en el malecón Turístico, continuamos con la coreografía esAmor de Andamios Teatro, estreno como coreógrafo, del bailarín y fotógrafo Gabino Guerrero. Las interpretaciones no dejan ni un cabo suelto por parte de Paula Ornelas, Daniela Urías, Gabriel Monroy y Germán Navarro, bailarinas actuando y actores bailando con el gran apoyo desde la asistencia de dirección de Tania Alday y asistencia de actuación de Nabila Nubes.
EsAmor nos hace testigos de la dificultad de un niño tímido y solitario para integrarse al juego de un grupo, y de cómo la solidaridad y el amor por parte de los otros niños le permiten vencer sus límites y disfrutar de la libertad de ser, en la metáfora del vuelo. Con este mensaje de paz y armonía cerramos la jornada artística del domingo.
El segundo fin de semana de presentaciones en la sede del Conservatorio y Malecón Turístico inició el viernes 13 de octubre en el Salón Orquestal con Dédalo Artes Escénicas y la pieza Agridulce, testimonial a los treinta de Zuleima Burruel, un potente testimonio de vida acerca del proceso hacia la adultez, imágenes poderosas construidas escénicamente a través de metáforas contundentes en su sencillez: el complejo camino de la vida representado con trozos de madera, que también pueden ser rieles de tren que cargan, que le permiten avanzar, que la sostienen, que lastiman, que se caen y se desarman y se vuelven a armar.
En agridulce la narración está encarnada y nos conecta a la realidad cotidiana de la sobrevivencia, al miedo a equivocarnos y a la pérdida de la inocencia. Un trabajo memorable de factura impecable y que seguro, sigue resonando en cada una de las personas que tuvimos la fortuna de vivirlo.
El Sábado 14, el arte circense vuelve hacer su aparición en el Malecón Turístico, ahora con un trío de talentosas jóvenes y su Chow sin nombre, título que le dan a la pieza que inicia con una escena clown donde dos personajes en situación de calle hurgan en un bote de basura, los objetos que encuentran, sirven de detonante para realizar un número de Slak line por parte de Bárbara Castillo, uno de Hula Hoop realizado por Celeste Irigoyen y cerrando con el número estelar de danza aérea por parte de Ingrid Romero.
Para cerrar la noche presenciamos en el Foro al aire libre del Conservatorio de Música, la obra Color e identidad con el grupo Dédalo Artes Escénicas y la dirección de Xicoténcatl Núñez, donde a partir de un dispositivo escénico interactivo, el público tiene la posibilidad de elegir a través de una aplicación web, el orden de las piezas de las que se compone la obra, que como su nombre lo dice, evoca y cuestiona rasgos de la cultura mexicana que para bien o para mal nos dan una identidad hacia el mundo. El equipo creativo responsable de esta propuesta fueron Xicoténcatl Núñez y Zuleima Burruel en la coreografía, acompañados en la interpretación de Karina Corrales, Adrián Jiménez y Teresa Vega, la composición sonora original de Roberto Mendoza, la composición visual de Gerardo Audifferd, la escenografía de Germán Noriega y la aplicación web de Jorge Gerardo.
El domingo 15 de octubre, última tarde del festival, cambió de sede al kiosco del Centro Histórico y también de escena, ahora el teatro itinerante se hizo presente con DesCierto Cabaretito de la Cachimba Teatro, una obra escrita por el Maestro Roberto Corella y dirigida por Andrés Carreño, un despliegue de talento y experiencia escénica por parte del reparto: Daniel Borbón, Glenda Landavazo, Zahaira Santa Cruz y Carlos Valencia, que nos cuentan de manera divertida y metáforas llenas de poesía, los encuentros y desencuentros entre un río y una laguna y la fauna del desierto como cómplices de las peripecias del relato.
Continuamos con el muy esperado Recorrido Histórico que sin duda integra con más fuerza, no solo a la comunidad de Guaymas, que ya es un gran logro, sino a la otra comunidad de artistas y participantes foráneos que se conforma alrededor de un festival artístico.
La combinación de elementos para esta propuesta es infalible y sumamente gozosa: Tarde de domingo, el maravilloso clima de octubre, una caminata guiada por la narración del actor Ricardo Barreto quien nos comparte la historia de edificios y calles emblemáticas de la ciudad: El Banco Occidental de México, la Iglesia San Fernando, La casa de Loreto Encinas de Avilés, el Cuartel de los Franceses, el Callejón de los Triques, la Plaza de la Pistola, la Plaza 13 de Julio y un mural en proceso de creación del pintor Guillermo Solís y por si esto fuera poco, entre un lugar y otro disfrutamos de las intervenciones dancísticas a cargo de academias invitadas que hicieron despliegue de talento, pasión, compromiso y creatividad y que no dudo, están siendo semillero de futuros profesionales de la danza sonorense: Universidad Tecnológica de Guaymas, Azul Ramírez, The Bonfire crew, Quetzal, Amira Malak, Y STUDIO, Fancy Estudio Profesional de Danza, BAILALO Studio, Charlys Crew.
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Terminado el recorrido, regresamos al kiosco para seguir disfrutando del teatro con el montaje de Multicultural Sonora, la obra El Buqui y el Mezquite, obra dirigida por Dettmar Yáñez e interpretada por Carlos Valencia, Gabriela Monzalvo e Iván Silva, quienes nos comparten con esta historia el valor y rescate de las tradiciones de nuestros pueblos sonorenses y el cuidado de la flora y fauna del desierto.
La tarde finalizó con el concierto de la agrupación musical Son Desierto, que convocó a participantes, organizadores y audiencias a despedirnos de una maravillosa semana de arte escénico y convivencia y deseando al arribo de la Séptima edición de Tránsito en el Mar, el próximo año.
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