La cuenta atrás para la boda de el príncipeHarry y Meghan Markle ha comenzado y la actriz canadiensecada vez está más involucrada en su papel como miembro dela familia real, tal y como podíamos comprobar ayer durante lavisita de la pareja a las instalaciones de una de las radiosjuveniles del país. Pero aunque Meghan cumple a laperfección con su nuevo trabajo y reconoce sentirsefeliz, ha tenido que renunciar a muchas cosas de su antiguavida.
Después de abandonar su trabajo en la serie de Netflix,"Suits", que la catapultó a la fama paradedicarse a sus nuevos compromisos reales y trasladarse avivir a Londres, Meghan cerraba ayer martes sus redessociales.
La actriz se ha fugado de la red y dado carpetazo a su cuenta deInstagram, Facebook y Twitter, donde antescompartía sus trabajos y daba voz a su compromiso conUnicef.
"La señora Markle está agradecida con todos losque han seguido sus cuentas en redes a lo largo de los años.Sin embargo, como no ha usado estas cuentas durante un tiempo, hatomado la decisión de cerrarlas", confirman desdeKensington Palace, cumpliendo así con la protocolo que marcala casa real británica. Ya en abril del año pasado Meghancerraba su blog de tendencias.
La boda entre Meghan y Harry se celebrará elpróximo 19 de mayo en la capilla del palacio deWindsor y la actriz ya está preparada para formarparte de la realeza británica.