Una de las armas más efectivas que ha tenido en este torneo el profesor Gabriel Pereyra ha sido el volante-extremo Ángel Adán López, quien suma dos anotaciones en este torneo, el segundo de ellos de gran manufactura arrastrando el balón desde su propio campo, eludiendo rivales y mandando el esférico al ángulo, colaborando en buena medida al arranque positivo de los Cimarrones de Sonora.
Este torneo es el segundo de Ángel con los sonorenses, quien se presentó con el equipo cuando recién llegó en enero marcando un golazo muy similar, pero aquella vez con la pierna izquierda ante Tampico, así que el manejo de ambos perfiles, velocidad y picardía, son características que le han aportado al estilo de juego de su escuadra que le ha redituado con buenos resultados.
“Sabíamos que iba a ser un juego complicado, que ellos iban a tener el balón en su cancha, en su estadio, pero nosotros sabíamos a lo que íbamos a jugar y se dio el resultado, nosotros mental y físicamente estamos muy fuertes, tenemos mucha velocidad por los costados y vamos a seguir por ese camino, pero tenemos que mejorar en la posesión de balón, porque sabemos jugar y es lo que vamos a trabajar en la semana para tener un buen juego aquí”, afirmó.
El originario de Guasave, Sinaloa, pero surgido de las fuerzas básicas de los Rayados de Monterrey, atribuye el buen inicio del equipo, con ese paso perfecto que ostentan, al trabajo que realizan por igual todos sus compañeros, donde los esfuerzos se reparten de igual manera y nadie escatima nada, la unión de grupo es lo que les ha permitido iniciar así.
Además, el estilo de juego que le ha venido a imprimir el profesor Pereyra al equipo le ha caído de maravilla al atacante, pues su estilo es siempre de ir para adelante con un juego muy vertical y así le agrada a su entrenador jugar también, tener la mira puesta siempre en el arco rival y buscando hacer goles todo el partido.