El movimiento skate en Hermosillo sigue vigente en niños, jóvenes y adultos, quienes practican esta disciplina como algo que ya es parte de su día a día.

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Dentro de este ambiente en la capital sonorense, se encuentra Juan Pablo Moreno Cano, quien es uno de esos patinadores que crecieron con una tabla en los pies y que habló con El Sol de Hermosillo respecto a su experiencia dentro de esta actividad física en la ciudad.

“El skate a mí me engranó en el momento en que entendí cómo me ayudó como persona. Me gustó mucho porque aprendes sobre ti mismo, a conocer tu cuerpo, cuando aprendes trucos nuevos empiezan batallas mentales de ‘si podre hacerlo no’ y eso me ayudó en mi vida personal”.

“Es muy bonito compartir eso con una comunidad donde sabes que todos están aprendiendo, se están divirtiendo y hacemos amigos, familia, patinamos juntos y crecimos juntos”, comentó.

“Pienso que el ambiente del skate en Hermosillo varía mucho, hay momentos en que veo mucha gente y otras en las que más poca, pero siempre hay gente patinando, eso nunca se ha acabado”, agregó.

Además, explicó que en la ciudad hay varias competencias, incluso hace unos cuantos días se realizaron un par de ellas, una en el Oasis y otra en El Bowl, sitio donde se suelen reunir patinadores locales.

Cabe señalar, que El Bowl es un sitio especializado en la ciudad donde se practica este deporte y además se da clases a principiantes.

Skate como deporte

Según lo explicado por el patinador, dentro del mundo del skate siempre ha existido cierto debate entre aquello que lo consideran deporte y otros que sólo lo ven como una actividad física, sin embargo, cabe señalar que, existen competencias organizadas e incluso han debutado en Juegos Olímpicos, por lo que se puede llamar como una disciplina deportiva en regla.

“Esa transición se me hizo muy interesante, yo no sé si catalogarlo como deporte o más bien como actividad física, hay una batalla ahí en que al skate no lo puedes calificar, pero a mí se me hace muy padre que haya llegado tan lejos al punto de llegar a las Olimpiadas”.

“Fuera de las Olimpiadas también hay competencias muy grandes del skate que se podrían catalogar como lo más alto del skate, pero fuera del ámbito no las conocen, pero para la gente que no patina, verlo en ese tipo de eventos, abre las perspectivas”, señaló.

De igual manera, aseguró que esto también ayuda a quitar ciertos estigmas sociales que se han vinculado con esta disciplina, desde que los patinadores son vagos o que no se debe practicar por jóvenes porque están expuestos a lesiones muy graves.

“Comienzan a ver a los patinadores como personas dedicadas y está padre porque al final del día lo bueno es que esta comunidad crezca y es una buena manera de generar interés en ellos”.

“Si te estás metiendo al skate es porque sabes que habrá golpes, no necesariamente que involucren fracturas, ni sangrado como la mayoría de la gente que no lo practica se imagina, pero hay manera de aprender muy progresivo para que te puedas evitar golpes fuertes cuando vas empezando”, expuso.

“Hay muchas maneras de aprender cómo vas a caer para evitar golpes fuertes, te puedes caer, raspar, pero es parte del aprendizaje. A las personas que están aprendiendo, les diría que no le saquen la vuelta, porque también aprendes a lidiar con el dolor”, mencionó.

Para Moreno, el skate también ha sido una parte fundamental en su estado de salud, pues al practicarlo te da pie a seguir manteniéndote en forma para poder mejorar en la disciplina.

“Es muy buen ejercicio, usas todo el cuerpo, constantemente se piensa que sólo se usa las piernas, pero constantemente se usa los brazos, el abdomen, la cabeza, es un deporte muy completo”.

“Gracias al skate fue una motivación de ‘quiero patinar mejor, quiero hacer cierto truco’ entonces cuando no patino salgo a correr, hago otro tipo de ejercicio que me van ayudar a patinar de cierta manera”, explicó.

Con la patineta desde niño

El hermosillense de 27 años de edad, fue influenciado por su hermano desde niño, quedando enganchado desde pequeño y siendo entre la edad de los 10 u 11 años que pudo hacerse de su primera patineta que realmente se adentro a este ambiente.

“Lo conocí desde niño con mi hermano mayor, me acuerdo que él tenía una patineta y yo era el hermano menor que quería estar ahí pegado”.

“Me mudé de colonia a Villa Satelite y paso por un parque, el Solipark y es cuando realmente me topé con la escena skate en Hermosillo, todo eso que veía en videos, lo veo ante mis ojos, pero mis papás nunca quisieron comprarme una patineta”, recordó.

Juan Pablo explicó que su primera patineta llegó de manera curiosa, pues se fue armando con partes que sus amigos y conocidos tenían que ya no usaban, logrando armarse una completa con la cual inició su camino en el skate.

El hermosillense también estuvo en competencias a nivel local, pero también saliendo fuera, tanto dentro del país como fuera.

“Me ha tocado conocer la escena en Hermosillo, Guaymas, Obregón, Caborca, Puerto Peñasco, en Sonora. Con AtomicSkate me tocó conocer unos parques de Phoenix y Tucson, Arizona. Por mi cuenta estuve patinando en Ciudad de México, Aguascalientes en un Nacional y Veracruz”.

“A lo mejor no soy la persona más indicada para hablar de esas escenas porque mi tiempo allí fue muy corto, hay otros exponentes que tuvieron la oportunidad de patinar con personas de fuera”, se sinceró.

Por último, invitó a los jóvenes a realizar deporte y si les llama la atención el skate, acercarse a conocerlo.

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“Yo les recomendaría que lo intenten, si tienen curiosidad se acerquen, platiquen con patinadores, hay clases en El Bowl o en Skate Time School, se van a divertir mucho, van a conocer mucha gente, van aprender mucho de sí mismos y su entorno, no se van arrepentir, la patineta siempre ayuda en algo, tanto físico como personal”, finalizó.