María Valenzuela, corredora de autos lleva la velocidad en la sangre

Al igual que su padre, la joven de 13 años de edad corre en las pistas de ¼ de milla desde muy pequeña

Francisco Hernández | El Sol de Hermosillo

  · sábado 15 de octubre de 2022

Con la inauguración del Autódromo Cerro Colorado en Hermosillo los arrancones volvieron a tomar fuerza en la ciudad / Foto: Cortesía | Mike Acosta | El Sol de Hermosillo

Las carreras de arrancones comienzan a volver con mucha fuerza en la capital sonorense, tras la inauguración del Autódromo Cerro Colorado en Hermosillo, sin embargo, la tradición de esta disciplina viene desde hace décadas con la antigua pista.

Esta tradición por la velocidad y adrenalina se transmite entre generaciones y ese es el caso de María Elena Valenzuela, hermosillense de 13 años que compite desde los siete en las carreras de arrancones.

“Desde chiquita vengo a las pistas, a las carreras y siempre me han gustado, luego un día mi papá llegó y me dijo 'ten un carro' y desde ahí seguí”, comentó para El Sol de Hermosillo.

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Para la joven, subirse al auto y prepararse para salir a la pista, deja un mar de emociones que le llenan de felicidad.

“Muy padre, es mucha adrenalina, te da mucha felicidad… No es tan diferente (conducir a otros carros), pero si obviamente es otra velocidad”.

“Es muy divertido, es lo que más me gusta hacer y más disfruto y algo que le recomiendo a todo el mundo”, afirmó.

Sobre la conducción, intentó explicar un poco el funcionamiento, “primero se quema llanta y te acomodas en el semáforo, los carros grandes traen un botón que se llama transbrake que se usa en cuanto le picas sale, aceleras a fondo y ya nomás es pie y manejar el volante”.

Cabe señalar que el botón transbrake es el mecanismo por el cual se activa la transmisión de A hacia adelante y hacía atrás del engranaje, haciéndolo de manera simultánea.

A sus 13 años María Valenzuela ya ha competido en las categorías menores de arrancones / Foto: Cortesía | Mike Acosta | El Sol de Hermosillo


De esta manera, el motor genera toda la potencia requerida sin transmitirla a través de la línea de transmisión, lo cual permite al automóvil quedarse en el mismo lugar.

De igual manera, María Valenzuela explicó que por la pandemia las carreras se vieron afectadas y no pudieron llevarse a cabo en la categoría Junior Dragster, pero al igual que su padre, se encuentra regresando a la actividad.

“Por motivos de la pandemia no se pudo tener una categoría de Junior Dragster y en este hace poco me metí a un bracket y es muy padre”.

A sus 13 años, ha competido en las categorías menores de arrancones en coches ajustados a su medida de un 1/8 de milla.

“En el viejo autódromo de Hermosillo y he ido a Tucson con mi papá, él ha corrido allá, pero yo no… Es cero peligroso si cuentas con las medidas requeridas, que se animen, que vengan, es muy divertido, es una velocidad alta y eso lo hace más divertido, anímense”, culminó.

La velocidad y adrenalina se transmite entre generaciones y ese es el caso de María Elena Valenzuela / Foto: Cortesía | Mike Acosta | El Sol de Hermosillo


¿Qué son los arrancones?

Para entender un poco más esta modalidad del automovilismo, también conocida como drag racing, se debe aclarar que se estipula nació en la década de los años cuarenta en los Estados Unidos, dónde se realizaba de manera ilegal entre los jóvenes y soldados que habían sobrevivido a la Segunda Guerra Mundial.

La modalidad más antigua es el Cuarto de Milla (402 metros) y la segunda más conocida es el Octavo de Milla (201 metros), teniendo una duración aproximada entre los 20 y 10 segundos, respectivamente.


Desde corta edad María Valenzuela mostró su pasión por los autos al igual que su padre / Foto: Cortesía | Mike Acosta | El Sol de Hermosillo

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A raíz del auge y aceptación que fue teniendo en el público clandestino y en un intento de hacerlo en entornos más seguros, nació la National Hot Rod Association (NHRA) en 1951, la cual comenzó a disputar eventos regulados.

En México, el auge de esta actividad se vivió en los años 70, sobre todo en la capital entre los jóvenes que buscaban la adrenalina.


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