Con el fin de año cada vez más próximo, comienza el recuento de los daños que la pandemia de Covid-19 ha dejado en el deporte de 2020, cortando procesos competitivos de miles de atletas en todo el país, con aspiraciones de sumar puntos y condición física para eventos internacionales.
A nivel amateur en Sonora una de las disciplinas más golpeadas fue la del atletismo, dicho sea de paso es la disciplina que mayor cantidad de medallas aporta en evento nacionales como los Juegos Conade, antes llamada Olimpiada Juvenil.
Una de las más laureadas de los últimos años es sin duda la velocista cajemense Sofía Soto, poseedora no sólo de una gran cantidad de medallas nacionales, sino también de los records de dicha competencia en 100 y 200 metros planos.
Otra velocista que viene pisando fuerte en la prueba reina del atletismo es Mercedes Talamante, y en pruebas de fuerza han brillado con luz propia las hermanas Diana y Loreto Jacobo, con excelentes marcas en lanzamiento de martillo.
Pero el atletismo de la Ola Roja es mucho más mencionar algunos nombres de figuras que han engalanado este tipo de eventos, ya que constantemente surgen talentos en todo lo que respecta a la pista y campo con extraordinarios saltadores de longitud, lanzadores de bala y jabalina, especialistas en carreras con obstáculos y de medio fondo, además de las competencias de relevos.
Pues bien, todos estos competidores han tenido un año muy frustrante que aunque intentaron mantenerse en buenas condiciones físicas con ejercicios en casa, vieron una luz al final del túnel cuando Sonora alcanzó el amarillo en el semáforo epidemiológico y se pensó que por añadidura las competencias volverían a las pistas.
Dicha luz se vio apagada con el rebrote que nos puso de nuevo en alerta máxima en cuanto a las medidas de prevención, consolidando la pérdida de todo el año competitivo y por ende una falta total de ritmo a la que deberán someterse al volver.
Un retorno desigual
Cuando las condiciones de un espacio deportivo están mal se dice que no hay ventaja porque están mal para todos los competidores por igual, pero en esta ocasión no es así, ya que varias entidades manejan números más halagadores en cuanto al nivel de contagios por Covid-19, lo cual ha permitido a sus deportistas volver a los campos de prácticas con las debidas precauciones sanitarias.
Para Sonora la historia no ha sido alentadora en este rubro y por ende los atletas volverán en enero o febrero (siendo muy optimistas) con poco margen de tiempo para ponerse en condiciones de los próximos Juegos Nacionales, donde seguramente las medallas bajarán de forma considerable.
A excepción de los maratones que se han ajustado a la forma virtual de competencia, el atletismo requiere de una actividad más presencial, sobre todo en competencias de velocidad, donde las variaciones de tiempos se miden en centésimas de segundo.
Se ha hecho un buen intento en competencias como maratones 5, 10 y 20 kilómetros, sin que éstas arrojen números oficiales para el ranking de los participantes, pero sí permite la competencia que aporta a mantener ritmo deportivo.
Una alternativa
En palabras del presidente del Comité Olímpico Internacional, Thomas Bach, “El deporte es una fuerza cultural vital, una pasión y una alegría para las poblaciones, y debe desempeñar un papel central en la reconstrucción de las comunidades y las economías una vez que la pandemia disminuya”
“Todas las partes interesadas incluidos los aficionados, atletas, federaciones y otras, deben unirse y trabajar juntos para mitigar el daño de Covid-19 y planificar colectivamente la recuperación del sector a largo plazo”, agregó
Problemas alternos
Uno de los problemas más graves para los juveniles atletas bajo este confinamiento es afrontar igualmente y de manera correcta la parte mental, ya que al estar encerrados, genera una necesidad básica de sacar toda esa energía y canalizarla en competencias, algo que tiene muy frustrados a muchos dentro del sector.
Esto se ha convertido en una pena para muchos niños y jóvenes porque no han podido compartir vestuario con compañeros, no han trabajado en equipo y con tanto tiempo fuera de acción hasta podría perderse la pasión por jugar y por formar parte de un colectivo.
El representativo sonorense cuenta con competidores de entre 7 a 17 años, quienes buscan mantenerse físicamente activos de una manera u otra, pero recuperar estos meses perdidos en aspectos será complicado a la hora de pisar nuevamente las pistas.
Lo que viene
Estamos a pocos días de poner fin a este año que seguramente varios queremos olvidar, pero la actividad atlética deberá seguir adelante lo más pronto posible, dando paso de nueva cuenta a una de las disciplinas más espectaculares a nivel amateur, profesional y olímpico.
Tenemos en Sonora a varios de los mejores atletas del país que claman por una oportunidad de volver y para lo cual el director de la Comisión del Deporte del Estado de Sonora (Codeson), Gabriel Tapia Montiel tiene planes de reintegración paulatina que deberá iniciar con el nuevo año, y donde el atletismo podría presentar ventajas ya que es un deporte al aire libre, donde no hay contacto físico directo entre los competidores y los espacios son sumamente amplios.
Es necesario reactivar lo más pronto posible el deporte que más ha dado para la entidad sonorense en los últimos años, sin demeritar otras disciplinas para algunas de las cuales si se ha encontrado alternativa con las competencias virtuales.
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Ya estamos ansiosos de ver a nuestros jóvenes sonorenses corriendo a toda velocidad sobre las pistas de tartán, mientras que otros saltan más alto y más lejos, además de los deportes de fuerza como lanzamientos de bala, disco, jabalina y martillo.