Viven gran campaña Gallegos y Urías en Grandes Ligas

El obregonense llegó a playoffs con Cardenales y el orgullo de Magdalena se afianza con Padres

Francisco Hernández

  · jueves 3 de octubre de 2019

Foto: Especial

Los sonorenses Giovanny Gallegos y Luis Urías vivieron un gran momento con sus equipos (San Luis y San Diego, respectivamente) durante la temporada regular de la MLB, donde ambos se ganaron a pulso roles importantes.

El serpentinero oriundo de Obregón demostró su capacidad, que ya había dejado por momentos cuando vistió la casaca de Yanquis en campañas pasadas, sin embargo, fue hasta esta que encontró su mejor versión, siendo un relevo seguro y constante con Cardenales.

Gallegos lanzó en 66 apariciones a la loma en las que forjó un récord de 3 triunfos y 2 descalabros con un salvamento, para un porcentaje de 2.31 con un total de 93 ponches.

Además, San Luis (91-71) fue campeón de su división, una que fue más que peleada con Cerveceros de Milwaukee que debió confirmarse con uno de los comodines de la Liga Nacional (para posteriormente ser eliminado por Nacionales de Washington) y Cachorros de Chicago, quienes quedaron fuera pero pelearon hasta el final.

Por su parte, Urías a sus 22 años de edad ya vive el sueño de todo pelotero, jugar y ser constante en la gran carpa, por lo menos así lo fue gran parte de esta temporada.

El magdalenense aprovechó el mal momento de Padres, así como algunas lesiones para poder volver a pisar el primer equipo en el que no dejó que desear, siendo más constante con una aceptable actuación con el bat y buenos chispazos a la defensiva.

Luis sigue buscando concretar ese paso de ser uno de los mejores prospectos en Ligas Menores para San Diego a ser una realidad en Grandes Ligas y oportunidades como las de esta campaña, bien tomadas, pueden ser lo que necesitaba.

El Infilder marcó un promedio de .223 en 215 turnos al bat, para un total de 48 imparables, 4 cuadrangulares, 27 carreras anotadas y 24 producidas en un equipo que culminó último de su división con un récord de 70-92.

Sólo el tiempo podrá definir si ambos peloteros logran mantenerse en el mejor beisbol del mundo, pero han dado un paso importante y dependerá de ellos seguir ganándose esa confianza.