Voltereta de Yaquis los pone adelante en la serie ante Charros

Ciudad Obregón llegó a tener una desventaja de 7 carreras, sin embargo, terminó por castigar al bullpen de la escuadra visitante

Francisco Hernández

  · viernes 25 de enero de 2019

Foto: Especial

Yaquis de Ciudad Obregón (2-1) recibió en su casa la visita de los Charros de Jalisco (1-2) en el tercer duelo de la serie por el campeonato, donde la tribu logró una voltereta de siete carreras sin respuesta para llevarse la victoria 10-9 y quedarse dramáticamente con el tercero.

En el duelo de abridores, el cubano, Yoanner Negrín saltó a la lomita por los locales, mientras que Manny Barreda los hizo por los visitantes.

Maikel Cleto se llevó el triunfo, mientras que Chad Gaudin terminó con la derrota.

Con el score 6-0 en contra, Obregón logró romper el cero en el cierre del segundo episodio, tras un sencillo productor de Carlos Sepúlveda entre primera y segunda, una línea suficiente para que timbrara Isaac Paredes la primera sonorense.

Pero el poder jalisciense volvió a encenderse en el tercer ining con un tablazo por todo el izquierdo de Murillo, cuadrangular de dos carreras para poner la pizarra 8-1 para Charros.

Sin embargo, la pizarra no dejó de moverse, pues la tribu colocó dos más a su cuenta en una línea de imparable por parte de Anderson Hernández de par de carreras para el 8-3.

Los Charros siguieron cantando en el quinto rollo, tras el palo de vuelta entera de Henry Urrutia en solitario para la novena rayita visitante.

Pero tras un apagón en el estadio, Yaquis explotó con la madera y vapuleó el bullpen visitante con un rally de cinco carreras, donde Moisés Gutiérrez encendió todo Obregón con un grand slam por todo el derecho que ponía las cosas 9-8 en la misma quinta entrada.

La tribu lograría igualar un juego que parecía una paliza en el inicio, empatando 9-9 en la sexta entrada en un rodado a las paradas cortas por parte de Sepúlveda, llegando Jesús Valdez con la del empate.

La debacle jalisciense y la hombrada sonorense se dieron en el cierre del octavo rollo en un elevado de sacrificio del eterno Íker Franco, anotando Leo Heras la décima de Yaquis, logrando una voltereta y triunfo de gran importancia.