El acampar y estar en contacto con la naturaleza siempre será una experiencia que reanima el espíritu, el respirar aire puro, escuchar el ruido de los animales a la distancia, las aves y sus cantos y el poder sentir por el olfato la esencia de que se está en un territorio poco transitado por el hombre y por lo tanto en estado prácticamente natural.
Ahora imagínate hacer eso pero a una gran altura, a más de 50 metros del suelo y dominar todo el paisaje hasta donde las luz nos lo permita, sin lugar a dudas una experiencia que debe de ser increíble e inolvidable, pero que de seguro nos mantendrá en estado total de alerta y reconociendo que no es una aventura para cualquiera.
Imagina estar posado en una cama, que más bien es una especie de colchoneta tensada a modo de catre y pegada a la pared de la montaña, a esto se le conoce como “camping en acantilado”, un deporte que se está poniendo de moda en diferentes partes del mundo y todo fue a raíz de que Kevin Jorgeson y Tommy Caldwell subieran al acantilado El Capitán en el Yosemite National Park y esas fotos de los dos hombres colgados de la montaña en su tienda de campaña dieron la vuelta al mundo.
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En el Estado de Colorado hay varias empresas que se dedican a este tipo de aventuras y que incluso por la alta demanda ahora tienen una lista de espera de meses adelantada, de aventureros que quieren dormir colgados de la pared.
La experiencia comienza con una buena escalada para luego hacer rappel hasta donde pasarás la noche y eso es lo que busca la gente, pues le gusta lo intensa que es la experiencia, primero llegar a sus límites y tener la oportunidad de ver la vida desde una perspectiva completamente diferente, es casi como tener superpoderes, estar en lugares donde solo la gente extraordinaria puede estar.
¿Qué tan seguro es el camping de acantilado?
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Hay muchas incógnitas y la más común va entorno a la seguridad y se sabe que en todo momento y a esa gran altura, siempre se está atado a una cuerda, los guías han hecho este trayecto en multitud de ocasiones y llevan al pie de la letra todas las normas de seguridad, durante toda la travesía el visitante está atado a una cuerda, aun mientras duerme.
Esto no se puede esconder, se trata de una experiencia que da mucho miedo, pero superar tus miedos es algo maravilloso y a la gente le encanta probarse y ver dónde tiene sus límites, el estar colgado en una tienda de campaña te brinda un perspectiva muy diferente del mundo, ahí solo y flotando en medio de la nada, es cuando se descubren ellos mismos.
Así como ese parque en Colorado hay acantilados por todo el mundo donde se están realizando este tipo de actividades, ahí la recomendación es ir con gente calificada y experta, para pasar una noche como ninguna y se convierta en una experiencia enriquecedora y no todo lo contrario, que por supuesto, no es la idea para nada.
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