Una enfermedad, un accidente o un imprevisto, pueden aparecer en cualquier momento de nuestras vidas, ninguna persona está exenta de alguna situación delicada que pueda mermar gravemente su economía.
En este sentido, siempre es una gran idea contar con un seguro que nos ayude a sobrellevar económicamente este tipo de situaciones, sin embargo el común de las personas desconfían de tener una póliza.
A pesar de toda la información existente sobre los seguros, muchas personas actualmente siguen pensando que estos servicios no se ajustan a sus carteras, o simplemente es dinero desperdiciado.
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En un sondeo realizado por El Sol de Hermosillo, se pudo constatar que aún se tiene desconfianza por estos instrumentos financieros.
Por ejemplo María del Rosario comenta que tuvo una mala experiencia: “Cuando recién entré a un trabajo hace 25 años adquirí uno, pero luego se me hizo injusto, el banco me lo canceló y perdí cuatro años que lo tenía pagando, no les tengo confianza y no tengo pensado contratar”.
Por su parte, José Manuel se quedó con una mala impresión pues la póliza que contrató no cubrió todas sus necesidades.
“Una vez contraté uno y lo estuve pagando mucho tiempo, casi seis años y cuando necesité en servicio médico para algo bien sencillo, me dijeron que mi seguro nada más me cubría una cita médica gratis, tres llamadas telefónicas de asesoramiento médico y los medicamentos correrían por mi cuenta”, lamentó.
“Creo que muchos no son regulados, muchas veces contratas seguros de gastos médicos mayores y no son mayores, conozco un caso dónde a una persona le hicieron tres o cuatro operaciones y después ya no le cubría, después de eso siguió con su problema”, relató Alejandro Ruiz.
Y aunque algunos reconocen la conveniencia de tener un seguro, les parece que el costo es demasiado alto, como el caso de Alonso Trejo que dijo: “Es como el seguro de los carros, bendito sea Dios que lo necesites y lo tengas disponible en algunos de los casos, pero lo estás pague y pague y muchas veces no lo usas, no sé si será engaño o no, pero no me gusta eso”.
“Si no tuviera servicio médico, le daría importancia, una vez me acerque a averiguar y se me hizo muy caro y si me bajaban el precio no me cubría ciertas cosas, ahorita por mi edad creo que ya no me conviene”, comentó María Helena M.
Pero, ¿son o no son buenos?
Respecto a este tema, Argelia Sandoval, asesora de Seguros, comentó en entrevista para El Sol de Hermosillo que todas las personas deberían tener en la mente contratar un seguro de gastos médicos o de vida, ya sea que estén solteros, casados; con o sin hijos, ya que muchas veces se cree que no se tiene dependientes a quien apoyar en caso de una eventualidad, pero el principal beneficiario resulta ser uno mismo.
Explicó que todos los días nos encontramos en situaciones que nos pueden poner en peligro, cosa de la que casi nunca se está consciente, por lo que debemos tener y contar con esto como un respaldo para cualquier eventualidad, ya sea un accidente, alguna enfermedad o un fallecimiento.
En ocasiones -indicó- después de un fallecimiento se deja con pendientes a familiares, ya sean cuentas de hospital o alguna deuda que no se haya pagado; ya sea que estos estén como aval del fallecido o titulares de la cuenta de hospital; y es aquí donde el efectivo de estos seguros puede usarse para amortiguar o liquidar este tipo de deudas.
La asesora manifestó que estos apoyos también pueden funcionar como un respaldo para la misma persona que contrata la póliza, en dado caso que por una eventualidad ya no se pueda trabajar. El seguro ayuda a tener solvencia por algún tiempo en lo que se resuelve qué se puede hacer.
Los costos de este tipo de servicios dependen mucho de la edad de los clientes, entre más joven, será más económica la aportación que se tenga que dar a la aseguradora, además, si el solicitante se encuentra en muy buen estado de salud, muchas empresas aseguradoras dan el apoyo para tener la reducción de la prima, comentó.
La especialista aseguró que un mito muy común entorno a los seguros es que estos son muy caros; sin embargo, poniéndolo en perspectiva, una cuenta de hospital por lo general es muy costosa, así que, pareciera mucho el gasto de un seguro, pero si se llega a tener una enfermedad grave el costo hospitalario en ocasiones suele ser igual o mucho mayor a lo que se invierte en un seguro.
Argelia Sandoval apuntó que contratar un seguro de vida o de gastos médicos que ofrecen algunas instituciones bancarias está bien, sin embargo, muchas veces estos no se ajustan a lo que se está buscando y las personas no se dan por enteradas al no contar con la asesoría adecuada.
“Uno de las principales cosas que hacemos es explicar en qué consiste el seguro, si algo incluye o se excluye, no hay letras chiquitas es la verdad, tenemos bien claro lo que hay y lo que no hay en los seguros, por eso siempre es recomendable que busquen un buen asesor de seguros, esta puede ser la mejor compañía que pueden tener, pero si no cuentan con uno, difícilmente van a estar informados completamente de lo que cubre”, expresó.
Sobre el tiempo de aprobación de este servicio, la asesora indicó que desde que empieza a buscar el seguro, hasta obtenerlo, una persona tarda aproximadamente un promedio de cuatro días, teniendo en cuenta que este ya sabe lo que está buscando y que cuenta con un historial clínico limpio, es decir, sin enfermedades graves o algún tipo de accidente en su historial médico.
Señaló que en cuestiones de seguros existen varios tipos, los cuales pueden ajustarse a lo que la persona busca, como son, seguros de vida, dentro de estos hay seguros de ahorro, a corto plazo o a largo plazo, seguros de ahorro para niños, los cuales funcionan como un fideicomiso.
También puede haber ciertos seguros más especializados -abundó- como un seguro de ahorro médico para mujeres, el cual consiste en un plan a 20 años, en el cual mientras una mujer ahorra para el retiro, al mismo tiempo se crea una antigüedad, donde se protege a esta por cáncer, complicaciones en el embarazo, invalidez temporal y permanente.
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“Antes se tenía la creencia de que los seguros son para cuando uno fallece y esto es incorrecto, es todo lo contrario, hoy estos te permiten ahorrar para que puedas adquirir la suma asegurada o el dinero de aportación más un rendimiento que te van dando anualmente”, argumentó.
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