La aparición de delfines y lobos marinos muertos en un estero de la zona de Huatabampo, Sonora, no es un caso aislado o extraordinario, sin embargo es un recordatorio de que estos seres vivos están sujetos a las consecuencias del quehacer humano que afecta su entorno.
Luego de la mutilación de rayas y mantarrayas en la playa de Huatabampito por parte de la autoridad municipal para prevenir accidentes durante la pasada temporada vacacional de Semana Santa se volviera nota nacional, ciudadanos denunciaron el hallazgo de restos de delfines y lobos marinos en la misma zona.
Activistas ambientales señalan como probable responsables de la muerte de mamíferos marinos las acciones de granjas acuícolas locales, pero las evidencias no son concluyentes y apuntan más a una situación recurrente.
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Por ejemplo, en el litoral sonorense, durante el 2022 se rescataron y rehabilitaron unos 90 animales, de los cuales 25 son mamíferos acuáticos, de acuerdo al Centro de Rescate, Rehabilitación e Investigación de Fauna Silvestre A.C. (Crrifs), con sede en San Carlos, Guaymas.
Elsa Coria, médica veterinaria, directora del citado Centro de Rescate, señaló que falta evidencia para diagnosticar la causa de la muerte de los mamíferos acuáticos localizados en el estero Riito, en Huatabampo, pero advirtió que retirar o extraer agua del estero no causaría muerte de estos animales.
“De las fotos que me mandaron y pude revisar se observa que son dos, un delfín y un lobo marino que ya estaban en avanzado estado de descomposición y en este punto no se saben las causas y, cómo murieron hace mucho tiempo, no tenemos la evidencia para poder encontrar la posible causa”, comentó.
La especialista en rescate y rehabilitación de fauna silvestre en San Carlos, dijo que es importante mencionar que muchas veces las corrientes marinas traen cuerpos de organismos que murieron en zonas alejadas a la costa, en aguas abiertas.
Esta situación ocurre frecuentemente, en algunas zonas, depende la circulación del agua que arrastra a delfines o lobos marinos muertos a lugares recónditos, apuntó.
“Es normal que encontremos a lo largo de la costa mamíferos marinos muertos, entre otros animales como tortugas e incluso algunos peces grandes. Es normal. Recordemos que viven como nosotros los humanos, tienen una longevidad, están expuestos a enfermedades, a parásitos, bacterias, virus, incluso hongos, también contaminantes, en algunas zonas donde habitan”, expuso.
Otro factor —mencionó— que pudiera ser importante en la muerte de estas especies es la disminución o baja de alimento, situación directamente relacionada a la sobrepesca que el humano ha hecho, en general pero en el Golfo de California es mucho más evidente.
Otras posibles causas de la muerte de los animales marinos son colisiones con embarcaciones o el enmallamiento con artes de pesca. “Son muchos los factores y desgraciadamente no hay evidencia para saber qué sucedió con este lobo marino y este delfín”, destacó.
Acciones que salvan
El Crrifs, que preside la veterinaria Elsa Coria tiene como misión rescatar, rehabilitar y reintroducir a su entorno natural en el menor tiempo posible, a la fauna silvestre cuya integridad o salud estén en riesgo.
Además realiza investigación biológica y veterinaria básicas y aplicadas al mejoramiento del rescate, rehabilitación y reintroducción de la fauna silvestre.
El Crrifs trabaja con personal propio y voluntarios, altamente calificados, capaces de responder rápida y eficazmente a contingencias con fauna silvestre. Además ofrece cursos de formación de recursos humanos al servicio de la fauna silvestre en riesgo.
Personal del Centro asiste a donde se encuentren los animales en riesgo para atraparlos, valorarlos y atenderlos si lo requieren.
Elsa Coria puntualizó que esta es una de las áreas con mayor actividad, atendiendo fauna herida o en riesgo en la región de Guaymas y San Carlos.
Indicó que reciben reportes de la ciudadanía, de otras organizaciones o de autoridades tales como la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa).
Una de las principales causas de lesiones en los animales ingresados de los grupos de aves marinas y tortugas marinas, -comentó- fue la interacción con artes de pesca, tales como enmalles en chinchorros, anzuelos y líneas de nylon.
“Cabe resaltar que se ha incrementado el número de tortugas que ingresan a rehabilitación, incluso provenientes de otras localidades en la costa de Sonora, como el caso de dos tortugas varadas vivas en Bahía de Kino”.
Durante el 2022 se rescataron y rehabilitaron 25 mamíferos acuáticos, dos reptiles, 15 tortugas, 48 aves, para un total de 90 pacientes atendidos por el CRRIFS.
Desenmalle de lobos marinos
Una acción importante del Centro de Rescate y Rehabilitación es la liberación de lobos marinos, tortugas marinas y aves marinas de redes, hilos u otros objetos que se encuentren enredados en sus cuerpos..
Recordó que el Programa de desenmalle de lobos marinos de California (Zalophus californianus) fue con el que CRRIFS inició actividades en el 2017, en conjunto con autoridades ambientales mexicanas como Profepa, además de contar con la asesoría de The Marine Mammal Center, ubicado en Sausalito, California, USA, quienes transmitieron su experiencia en sedación remota.
“Como miembro activo de Pinniped Entanglement Group (PEG) de la NOAA desde el 2017 a la fecha, actualizamos nuestros protocolos de procedimientos y seguridad”, agregó.
El Crrifs colabora desde 2021 en la Red de Capturas Incidentales y Descartes (Red CID), la cual está formada por diversas organizaciones, instituciones e investigadores a nivel mundial, con el fin de compartir metodologías y procedimientos que mitiguen las capturas incidentales.
Como miembros de esta red, Crrifs ha aportado técnicas de liberación de pinnípedos capturados en diversas artes de pesca.
Desde el año 2019 contamos con un catálogo de lobos marinos enmallados de las cuatro loberas reproductivas frente a la costa de Sonora, sumando a más de 100 lobos que se encuentran en esta lamentable situación. Dicho catálogo se actualiza año con año, para darles seguimiento y conocer la tasa de reclutamiento anual.
De 2017 a 2022 se impartieron 9 capacitaciones en esta materia y se liberaron 13 lobos marinos de diferentes artes de pesca.
Atención a varamientos
Personal y voluntarios de Crrifs atienden animales varados en la playa, brindando cuidados médicos a los vivos y realizando necropsias a los que ya no lo están.
Regularmente se atienden varamientos de tres grupos principales de animales: Cetáceos, lobos marinos y tortugas marinas.
La labor de Crrifs incluye tanto la atención veterinaria en caso de organismos vivos, así como la realización de necropsia y toma de muestras para su análisis en varamientos de animales muertos, incluyendo la disposición de los restos con el objetivo de evitar daños a la salud de la población.
Durante 2022, se atendieron en total 27 animalitos varados, de los cuales ocho fueron mamíferos acuáticos y 19 fueron tortugas.
Protección de tortugas marinas
Otras de las actividades del Crrifs es atender la anidación de tortuga marina, procurando los cuidados necesarios para que las nuevas tortuguitas se desarrollen, en la playa o en incubación artificial, liberando a estas últimas donde fueron depositadas por la madre. “También estudiamos el estado de salud de tortugas adultas en zonas donde se alimentan”, apuntó.
Explicó que desde sus inicios en el año 2018, el Programa de Conservación de Tortugas Marinas de Crrifs ha sido uno de los más apoyados por la comunidad y cada año se incrementa la expectativa por las temporadas de anidación las cuales van de junio a diciembre.
“Debido a esto, el equipo de Crrifs en conjunto con un grupo de voluntarios concluyó con su quinta temporada de monitoreo y protección de nidos de tortuga marina en las playas de anidación de Guaymas y San Carlos”.
La protección de esta especie de 2018 al 2022 permitió salvaguardar 290 nidos; 25 mil 520 huevos y 18 mil 026 crías, precisó.
La presencia de tortugas anidantes (Lepidochelys olivacea) en la región es cada vez más evidente y va ganando terreno en las diferentes playas, prueba de ello es el incremento del 270% en el total de nidos reportados del año 2018 al 2022. Crrifs es miembro de la red Grupo Tortuguero de las Californias.
Zonas de alimentación
Elsa Coria indicó que el Crrifs inició el monitoreo en zonas de alimentación de tortugas marinas en la región de Guaymas en el año 2019, detectando una zona importante dentro de la bahía de Guaymas en la cual se contabilizaron más de 50 tortugas marinas, principalmente prietas (Chelonia mydas) y algunas carey (Eretmochelys imbricata) durante el último semestre de ese año.
La actividad de las tortugas prietas fue principalmente de alimentación, debido a la presencia de algas y pastos marinos en la zona. “Capturamos a 15 ejemplares como parte del monitoreo de salud, colocándoles una etiqueta metálica y se liberaron en la misma zona”.
Investigación
“Para nosotros es importante investigar las causas del daño en nuestros pacientes y sobre su biología, así como sobre mejores maneras y equipo para atenderlos y rehabilitarlos. También investigamos sobre la optimización de artes de pesca”, comentó la directora.
La investigación en Crrifs incluye estudios en el área clínica, derivados del manejo de los animales y su atención- rehabilitación, así como en nuevos métodos y equipo para ello.
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A partir de las necropsias se está investigando sobre las enfermedades que afectan a mamíferos marinos y tortugas marinas.
Otra rama de este programa es la innovación de artes de pesca, en el cual se está trabajando en una propuesta de red que tiene como objetivo ayudar a liberar de los chinchorros a los lobos marinos y potencialmente tortugas marinas.
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