La mutilación de cientos (si no es que miles) de mantarrayas en las costas de Huatabampo ha sido, probablemente, una de las noticias más polémicas en poner a Sonora en los titulares de todo el mundo, mostrando lo incomprendidos que siguen siendo estos animales.
Autoridades de ecología en Huatabampo, particularmente la ahora ex titular de la dependencia Elizabeth Guerrero Moreno, autorizaron que se les arrancara el aguijón a estos animales para “proteger” a los turistas que acuden en Semana Santa a las playas de Huatabampito, una práctica que ya se había realizado anteriormente.
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¿La justificación? Según Guerrero Moreno, el aguijón de las rayas vuelve a regenerarse con el tiempo y los animales pueden sobrevivir sin él.
Pronto la naturaleza entregó su respuesta a la ex funcionaria, y cientos de rayas aparecieron sin vida en las playas de Huatabampo, causando respuestas muy negativas entre organizaciones y dependencias de ecología dentro y fuera del país.
En El Sol de Hermosillo te aclaramos un par de dudas para seguir conociendo a las rayas, datos para tomar en cuenta al momento de visitar su hábitat con una perspectiva informada y de respeto.
¿Las rayas son venenosas?
Aunque en Sonora acostumbramos decirles mantarrayas, los pequeños animales que fueron mutilados en realidad se catalogan como “rayas”, siendo las principales diferencias el tamaño y la presencia de un aguijón.
La especie de rayas que se encuentra más comúnmente en las playas de Sonora, conocida como raya redonda o Urobatis halleri, sí tiene un veneno de moderada potencia, y las picaduras pueden ser muy dolorosas.
Como en muchas otras especies similares, la sierra o espina que se encuentra en la base de su cola se usa para defenderse de los depredadores, como tiburones pequeños, lobos marinos o peces más grandes.
Al verse en peligro, las rayas usan su aguijón para dar una dolorosa picadura e inyectar un veneno a base de una combinación de toxinas que causan dolor, inflamación y calambres musculares en el área afectada.
La picadura de raya no es peligrosa para la vida humana en la mayoría de los casos, pero al igual que ocurre con otros venenos como el de abeja, la reacción puede variar mucho de persona a persona dependiendo de su sensibilidad.
Si una raya te pica, se recomienda buscar atención médica inmediata para prevenir cualquier síntoma severo.
¿Qué pasa si les quitan el aguijón?
Muchos expertos que condenaron las acciones en el municipio de Huatabampo también reconocieron que es cierto que las rayas redondas pueden regenerar su aguijón, y de hecho lo pierden de manera natural cada cierto tiempo para crecer otro nuevo.
Aún así, al ser su principal defensa contra los depredadores, arrancar a la fuerza el aguijón de estos animales los deja completamente expuestos, además de que puede causarles daños irreparables de los que muchas veces ya no se recuperan; para prueba la gran mortandad que siguió a la mutilación de rayas en Huatabampo.
Para una raya perder la cola también afecta su habilidad para nadar y cazar durante el periodo en que esta vuelve a crecer, un proceso que puede llegar a durar varios meses. Las heridas además pueden infectarse o causar otros problemas de salud.
¿Cómo prevenir una picadura de raya?
En lugar de cortarles el aguijón y esperar que sobrevivan, hay algunas medidas que todos podemos tomar para prevenir una picadura que no involucran dañar al animal.
Arrastra los pies: Al caminar en aguas poco profundas, el hábitat de estos animales, arrastra los pies en lugar de pisar normalmente. De esta forma alertas a las rayas cercanas de tu presencia y evitas pisarlas.
Usa calzado protector: Si sabes que hay rayas en el área, puedes usar cualquier calzado adaptado al agua para mayor seguirdad. Esos “crocs” pueden no ser la última moda, pero sí van salvarte de una experiencia desagradable.
Abre los ojos: Las rayas se esconden en la arena, pero en agua clara puedes reconocer su característica forma circular o sus pequeños ojos viéndote desde el fondo.
Ahora si, ya sabes cómo cuidarte a ti y cuidar a estos animales cuando visitas su casa.
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