Exagerando las cualidades estéticas asociadas popularmente a la mujer, mediante la utilización de un vestuario femenino, peinados y maquillajes exuberantes, es como la expresión y la creatividad, se convierten no sólo en arte o terapia, sino en todo un estilo de vida.
Dolores La Muerta, La Yaritza y Ofelia Foote han encontrado a través del drag una manera de sentirse plenas al romper paradigmas sociales y sacudir la percepción de la realidad provocando una ruptura visual brusca al espectador.
La escena Drag Queen existe en la localidad y la transformación evoca diferentes sentimientos que comparten con El Sol de Hermosillo.
Pero antes, es conveniente explicar que el término Drag Queen proviene del acrónimo "Dressed as a girl" (Vestido como mujer).
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La teoría mayormente aceptada del origen es que este arte proviene del siglo XIX, en Reino Unido, con las presentaciones del burlesque victoriano, el cual evolucionó hasta lo que conocemos actualmente como el mundo Drag Queen.
Dragqueenismo, desde la percepción del artista
Después de un trabajo artístico de alrededor de 5 horas, las Drags Queens quedan listas para ser vistas, ninguna es igual, cada una tiene su esencia y su historia.
Para la draga Dolores La Muerta, quien nació hace un año, después de un intento fallido del suicidio de Fernando, este proceso de transformación ha servido como un mecanismo terapéutico que le ha ayudado a sobrellevar procesos emocionales.
"Yo veo a La Muerta como terapia, ya que hace unos años atrás Fernando (su nombre real) intentó suicidarse, no funcionó y a raíz de eso surgió la idea de hacer drag, por eso se llama Dolores La Muerta porque es el cadáver de Fernando”, contó.
En Sonora encontró ese lugar de libertad para poder expresarse, ya que indicó que en el Estado existe una mentalidad más abierta que en otros lugares del país, por lo que lo consideró empático.
“En Cancún, que es de donde yo vengo, casi no hay drag, hay mucho travestismo, imitación o chicas trans, pero drag es muy poquito, y por lo que veo aquí puedo decir que va muy avanzado”.
Dolores La Muerta explicó que al transitar por las calles recibe piropos y miradas de personas sorprendidas, pero no se ha presentado el caso de sentirse perseguida.
Por su parte, Jared es un joven que tiene tres años interpretando a La Yaritza, personaje que le ha ayudado a canalizar emociones a actividades recreativas.
“La palabra drag más que un significado es un estilo de vida que llevamos todas, en mi caso saco mi estrés, mi ansiedad que se convierte en creatividad, dicha palabra entre muchas cosas significa vestirse, pero para mi es una terapia”, comentó durante el momento de la transición a La Yalitza.
En esta ciudad, a pesar de que el Drag Queen relativamente va iniciando, su avance ha sido exponencial en los últimos años, debido a la proyección de la misma en diferentes plataformas tanto digitales como en escena.
“La escena drag en Hermosillo va a pasos agigantados puesto que hay muchos expositores y hay mucho talento, pero vamos creciendo todas”, agregó.
Mientras que para Ofelia Foote el mundo drag “es una forma de expresión del arte”, por lo que lo consideró como intrínseco y subjetivo.
Es algo complejo desde su concepción, dijo, pues la interacción visual e impacto de quien lo consuma variará dependiendo de su categoría y el tipo de proyección que ofrezca el artista.
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Sin lugar a dudas, el universo drag es una corriente artística con un sinfín de paralelismos y funciones, en sí un escape de la realidad y una oportunidad de catarsis para quien lo ejerce.
En Hermosillo es una ventana de posibilidades para el crecimiento artístico para todo/a aquél/ella que se anime a incursionar a este maravilloso mundo lleno de colores y disrupción social.
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