La naturaleza, los detalles y colores que conforman los paisajes, son parte esencial del trabajo que hace la artista Gabriela Quiñónez, pues no sólo practica las distintas técnicas del dibujo, sino también plasma sus sentimientos, emociones y su gusto por el arte en cada obra que realiza.
Gabriela estudió la licenciatura en Artes Plásticas, su trabajo lo distribuye a través de redes sociales y se maneja por pedidos, también es actriz, repostera, maquillista e imparte la asignatura de dibujo y pintura en una escuela privada. Sus lienzos se han expuesto en distintos municipios de Sonora, algunas partes de la República y en Estados Unidos.
En esta ocasión, por primera vez la artista está trabajando con un proyecto que le permite compartir sus obras en otros municipios, uno de ellos es el gran mural que plasmó sobre la carretera que se dirige a Huépac, Sonora.
En el 2019 el Instituto Sonorense de Cultura lanzó la convocatoria “Murales del Río Sonora”, el cual tiene como objetivo difundir el arte de los profesionistas en los 8 municipios que conforman esta ruta y fueron seleccionados 6 personas, entre ellos Gabriela, cada uno presentó 3 propuestas que se harán en estos lugares.
Cada artista realizó un mural distinto en cada municipio que conforma la Ruta del Río Sonora, Heroica Ures, Baviácora, Aconchi, San Felipe de Jesús, Huépac, Banámichi, Arizpe y Bacoachi.
El trabajo de Gabriela estaba planeado para comenzar a principios de 2020, pero al verificar algunos detalles y debido a la pandemia suspendió actividades, sin embargo este año podrá concretar su trabajo.
“A mí me gusta mucho el tema del desierto, sobre todo las plantas desérticas, me inspiran mucho y siento que tenemos mucho que aprenderles, por lo mismo me interesa su preservación, así que en mis propuestas de mural pretendo enaltecerlas. Aunque en general, en otros proyectos que tengo, por ejemplo de teatro, también manejo mucho el tema de la preservación de las especies, sobre todo del desierto”, compartió.
En su mural plasmó el fruto que más disfrutan los sonorenses en temporada de verano, las famosas pitahayas, de las cuales destacó su llamativo color, así como también mostró el crecimiento de la planta, la flor y el fruto. Las medidas de la obra son 11.60 m x 2.20 m y le llevó alrededor de 11 días para terminarlo.
“Fue una experiencia muy bonita, el pueblo muy tranquilo, bonito y la gente muy amable, incluso los perritos de repente iban a acostarse a un lado mientras pintaba, a veces la gente llegaba a platicar sobre el mural y a expresar su agrado, también como el mural está sobre la carretera principal, algunos carros se detenían a ver y comentar o simplemente pitaban en señal de agrado, cuando terminé el mío me pasé a ayudarle a una amiga que también quedó seleccionada, pero estaba en San Felipe”, mencionó.
Los objetivos principales de Gabriela son influir en la preservación del medio ambiente y lograr que las personas se interesen por el arte, que disfruten de los detalles que se ofrecen en cada lienzo y apoyen al medio artístico.
“Lo que más disfruto es sentir fluir mi creatividad porque a pesar de que hago tantas cosas, eso es lo que tienen en común, la creatividad. Me siento muy contenta y agradecida por haber sido seleccionada porque muchas personas podrán ver mi trabajo, pero lo más importante es que espero influir en las personas para la preservación de las especies, que por lo que vi, así será porque tuve muchos comentarios positivos”, señaló.
Gabriela espera a que cambie el semáforo para seguir trabajando en sus obras en los municipios y apoyar a su compañera en San Felipe, pero por el momento seguirá trabajando en algunas pinturas que espera que sean expuestas este año e impartiendo sus clases de universidad, así como también todas las actividades que realiza como el teatro, la repostería, entre otros.
“Me dejó muchas ganas de continuar con este trabajo, pero sobre todo el hecho de apreciar la vida en el pueblo, se piensa mucho que es mejor la ciudad porque tienes más cosas al alcance, lo cual es verdad, pero la tranquilidad y las vistas tan hermosas de los pueblos solo están ahí”, expresó.
Para conocer más acerca de los proyectos de Gabriela Quiñónez la encuentra en Instagram como @QuibenzArt y en la página de postres @Quibcakes, también en su Facebook personal como Gabriela Quibenz.
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“De verdad estoy muy agradecida con el universo por las oportunidades que he tenido, que me han permitido desarrollar mi trabajo creativo, creo que en mi trayectoria he influido en algunas personas, sobre todo niños y se siente bien bonito, espero continuar así”, concluyó.