En una ciudad donde la temperatura alcanza hasta los 50 grados centígrados, la producción de alimentos como las tortillas de harina, se vuelve poco soportable al mezclar el calor de los comales con el del ambiente.
Debido a esto, las mujeres que realizan esta tarea, como una actividad laboral, se vieron obligadas a modificar el horario en el que hacen la preparación de este producto sonorense que, por ningún motivo puede dejar de estar disponible.
Tal es el caso de las tortillerías ubicadas en el Mercado Número 2, a quienes, durante toda la noche y madrugada, se les puede ver muy activas y motivadas para evitar un poco el calor y desempeñar mejor su rol, como lo hace la señora Guadalupe Ramírez, quien lleva varios años en la producción de “tortillas grandes”.
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“Este año cambiamos el horario, estoy entrando a las 3:00 de la mañana y dejo de hacer tortillas como a las 11:00 o 12:00 del mediodía, cuando ya está muy feo el calor”, mencionó.
Así mismo, Luisa, quien se encarga del empaquetado de este producto, compartió para El Sol de Hermosillo que este es el primer año en el que se ven obligadas a trabajar por la madrugada en diferentes turnos debido a las altas temperaturas.
“Desde que empezó el tiempo de calor fue cuando decidimos cambiar el horario, entre todos lo propusimos y lo acordamos, normalmente entrábamos a las 4:00 o 5:00 de la mañana y ahora entramos a las 9:00 o 10:00 de la noche”, expresó.
Otra de las tortillerías ubicadas en el mercado de la colonia Balderrama, también realizó un ajuste de horario en la producción, lo que ha beneficiado a la empresa en general, así lo comenta Celia Sanchez Gómez, empleada del negocio.
“Llevo 3 años aquí y en temporada de calor trabajamos de 1:00 o 2:00 de la madrugada para salir más temprano, casi siempre en este tiempo hacemos el cambio de horario”, detalló.
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Señaló que iniciar con la preparación del producto desde más temprano, facilita el proceso de empaquetado ya que se le da más tiempo de enfriamiento a las tortillas, así como mayor comodidad para las trabajadoras de desarrollar su labor sin sufrir el calor que en conjunto con los comales y maquinaria, hacen la carga laboral muy pesada.
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