La chúcata es uno de los productos que se obtienen del mezquite; es una goma pegajosa color ámbar, que segrega la corteza del árbol en determinadas temporadas del año.
El Centro de Investigación en Alimentación y Desarrollo, CIAD, señala que esta goma -que tiende a endurecerse al perder humedad- se produce entre mayo y julio, antes de que inicien las lluvias.
Se consume preparada en bebidas, como producto medicinal o como un dulce duro y pegajoso que no pierde su sabor, y también puede prepararse como jamoncillo.
Lee también: “Come chúcata”: usos alimenticios del mezquite sonorense
Más allá de ir a comer chúcata
Una novedad sobre los usos de la chúcata son más allá de ir “a comer chúcata”, resulta que también se preparan jamoncillos con ésta.
Sí, el jamoncillo es el tradicional dulce de leche que está entre los principales postres que gustan a los sonorenses, pues ahora también hay de chúcata.
Abraham Suárez, originario de Querobabi, Sonora, y creador de contenidos en Facebook, publicó un video de doña Conchita, su mamá, quien elabora este producto en la cocina de su casa.
Quizás seas de las personas a quienes les gusta tomar y preparar recetas que ve “en Internet”, pues esta representa ciertos retos, comenzando con el de conseguir chúcata fresca y blandita.
¿Paso a paso para hacer jamoncillos de chúcata?
Lo primero que hay que hacer, dice la experta, es seleccionar la chúcata con que se cuenta, la de ella es recién bajada del mezquite, “la rosita es la buena”, dice.
Se tienen que limpiar las impurezas que tiene y hacer a un lado la chúcata que se hace goma, porque esa es para uso medicinal o para fabricar pegamentos.
Ingredientes
2 tazas de chúcata limpia
Medio litro de agua
½ kilo de azúcar
⅓ de barrita de mantequilla
El jugo de un limón
Se pone la chúcata a remojar en agua toda una noche o durante una tarde, en el sol, el objetivo es que se disuelva. Una vez derretida, se cuela y se revuelve con medio kilo de azúcar.
Luego se pone en la lumbre, a fuego medio, y tiene que estar revolviéndose constantemente para que no se pegue al cazo u olla donde se está preparando. Este procedimiento dura alrededor de hora y media.
También se le agrega un tercio de barrita de mantequilla. Se espera a que hierva sin dejar de mover, porque sube la preparación y puede derramarse. Si se pone a fuego bajo tarda más y toma un color muy oscuro, dice doña Conchita. En esta parte de la preparación se le agrega el jugo de un limón.
Ya que hirvió y se integraron todos los ingredientes, se coloca un poco de la mezcla sobre un plato y se prueba, la consistencia y se le cambia el color, haciendo movimientos circulares con una cuchara.
Puede ser ahí cuando ya está lista la preparación para hacer las bolitas de jamoncillo. Se dejan enfriar y ya están listos.
¿Quieres recibir noticias directo en tu celular? Suscríbete aquí a nuestro canal de WhatsApp
Con esta receta también pueden hacerse pequeños dulces chiclosos o melcochas, otro postre tradicional sonorense, de forma alargada y semicircular, que va envuelto en un papel encerado. ¿Te animarías a prepararlos?
¡Regístrate y accede a la edición digital de nuestro semanario!