La historia de la humanidad ha estado llena de misterios y misticismo, siendo uno de los más extraños la desaparición de personas que hasta la fecha, no cuentan con una explicación ni se ha podido encontrar rastro alguno.
Lamentablemente esto ocurre en todos lados dentro de nuestro mundo y hoy te presentaremos tres de ellas.
D.B. Cooper
¿Alguna vez has visto James Bond? Bueno, esta es la historia más similar de la cual se tenga conocimiento dentro del mundo real.
Aunque no es un suceso que se caracterice por misticismo, es sin duda uno de los actos de desaparición más impresionantes relacionados a una persona.
Todo ocurrió en la víspera del Día de Acción de Gracias de 1971, cuando el vuelo 305 de la Northwest Orient Airlines con destino al aeropuerto internacional de Seattle-Tacoma, fue notificado como secuestrado por un hombre que se hacía llamar D.B. Cooper.
El secuestrador aseguró tener posesión de varios explosivos y exigió una suma de 200,000 dólares por el rescate, cuatro paracaídas, y un camión de reabastecimiento de combustible al aterrizar.
Después de realizar esto último, tomó el dinero, cargó combustible, liberó a los pasajeros y pilotos, para después despegar de nuevo con rumbo a la Ciudad de México, según el piloto.
Sin embargo, treinta minutos más tarde del despegue, Cooper saltó del avión con los paracaídas y el dinero y hasta la fecha, el FBI nunca ha logrado tener pista alguna sobre su paradero.
Leah Roberts
En el mes de marzo del año 2000, Leah Roberts de 23 años de edad, tomó sus pertenencias y a su gato, salió en su coche en Raleigh, Carolina del Norte, para jamás volver a ser vista de nuevo.
Tras ser reportada como desaparecida, el coche de la estudiante universitaria fue encontrado el 18 de marzo de dicho año, completamente abandonado en una carretera forestal en el condado de Whatcom, Washington.
Por si fuera más extraño, la escena daba indicar que el auto había sufrido un accidente, sin embargo, se encontraba con las ventanas cubiertas como si alguien lo hubiera usado como refugio.
Además, en el lugar no se encontró ningún rastro de sangre, ni tampoco de la joven o su gato, aunque sus pertenencias seguían en el sitio.
Cuando parecía que las cosas no podían complicarse más, una semana después, un hombre llamó a la estación de policía, reportando que en una gasolinera bastante lejos de la escena, había visto a una mujer que coincidía con la descripción de Roberts, pero antes de dar más detalles, el hombre colgó.
Como dato curioso, previo a su desaparición, la joven ya había sufrido un accidente automovilístico con sus padres, quienes murieron en el acto, mientras ella sobrevivió. Según sus amistades, esto la cambió.
Cynthia Anderson
Hay veces que la vida cotidiana es sumamente extraña, sobre todo cuando ocurren situaciones como el caso de Cynthia Anderson una mañana del 4 de agosto de 1981 en la ciudad de Toledo en Ohio.
Anderson de 20 años de edad, laboraba como secretaria de un bufete de abogados y según reportes, esa mañana se presentó como cualquier otra a la oficina.
Sin embargo, cuando sus jefes llegaron al lugar, ella ya no se encontraba allí, faltaba tanto su bolso como sus llaves del coche, el cual aún seguía estacionado en su lugar de aparcamiento.
Sobre su escritorio, se encontraba una novela que ella estaba leyendo, la cual estaba sobrepuesta en la última página, la cual describía una escena de una chica siendo secuestrada.
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Desde ese entonces hasta la fecha, jamás se ha vuelto a saber sobre ella y a través de los años las teorías de si realmente fue secuestrada o es fugitiva de la ley por algo que nunca se reveló, nunca han sido respondidas.