Después de trabajar por más de 15 años en un salón de belleza aplicando uñas acrílicas, Nora Maribel Borquez cerró las puertas de su establecimiento tras la llegada del Covid-19 a Hermosillo. Al haberse quedado sin trabajo y con más tiempo libre encontró su gusto por la cocina, en especial por la preparación de postres.
Su inexperiencia en la cocina causaba que dudara en abrir su negocio propio, sin embargo, con el apoyo y motivación de su familia y amigos comenzó con la organización de la empresa y lanzó oficialmente su producto el pasado mes de junio.
“Yo siempre le tuve miedo a la cocina, a la sal y el azúcar, por si se me pasaba en algún platillo, siempre tuve respeto, entonces ya que estuve tanto tiempo en casa empecé a experimentar, primero hice comida: pozole, birria, cosas que nunca había preparado y luego con los postres. Primero hice un pastel al sartén y lo hice, mi esposo me prendió la estufa una vez y de ahí ya lo hice sola”, mencionó Nora.
Uno de los postres favoritos de la joven son los roles de canela, por lo que buscó videos en Internet para aprender a hacerlos, después de conocer varias recetas creó una propia con un toque especial y diferente donde la canela, el glaseado y la nuez se hacían notar en cada bocado.
“Al principio tenía muchos sentimientos encontrados si de verdad no quería volver a las uñas porque tenía decidido poner mi salón en casa por cuestiones de mis hijos, pero ahora que aprendí a hacer esto mucha gente me ha dicho que he cambiado mucho, que soy otra persona, más segura, más fuerte y que he crecido en todos los aspectos”, expresó.
En junio creó su página Horneando con Amor ofreciendo una amplia variedad en sus postres entre los roles de canela tradicionales o 3 leches, pay de queso, cupcakes, galletas, flan de chocolate o red velvet, pay de oreo, entre otros.
“Mi mamá es muy buena para la cocina y la panadería, pero yo nunca había hecho nada de esto; mi familia no podía creer que me dedicaba a la cocina, por eso ahora me siento muy orgullosa de mí por haber logrado algo que nunca pensé que iba a hacer”, señaló.
En su proceso de aprendizaje en postres entró en grupo de Facebook llamado Repostería Entre Todos donde considera que aproximadamente 80% que sabe de repostería lo ha aprendido en la página porque hay personas de otros países y se apoyan con las recetas, brindan consejos y mandan siempre sus buenas vibras.
“Estoy muy entusiasmada porque me gusta estar recibiendo buenos comentarios de la gente, ellos me elevan para echarle más ganas a esto, todo esto lo hago con amor, es hecho de manera manual, pero espero a futuro poder comprar una batidora para agilizar mi trabajo y seguir ofreciendo mis postres porque en mis planes no está regresar a mi trabajo anterior”, dijo.
Nora asegura que el mejor consejo que le dio su madre es preparar cada pieza con amor, así siempre compartirá un momento especial y único de la creación de sus postres con sus clientes, asimismo mencionó que sus precios son accesibles para que la gente pueda disfrutar de su producto.
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“No se den por vencidos si tienen algo en mente, háganlo y si no sale lo hacen hasta que demuestren que sí se puede, porque yo tenía miedo que no me saliera y ahora lo hago con la mentalidad que si me va a salir y me queda muy bien todo, no se den por vencidos, el Internet sirve para mucho y he crecido mucho como persona y mi mentalidad es muy diferente”, concluyó.
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