Por la inseguridad, Karla pausó inauguración de su florería en Magdalena

El proyecto de hacer un negocio por el Día de las Madres detonó en la joven la pasión por las flores y lo que puede hacer con ellas

Nancy Álvarez | El Sol de Hermosillo

  · lunes 16 de agosto de 2021

La joven estudió periodismo, pero descubrió su amor y pasión por las flores, con lo que quiso emprender/ Foto: Cortesía | Karla Cañizares

Debido a los enfrentamientos armados que se han presentado semanas atrás en Magdalena de Kino, muchos habitantes se han visto afectados por el cierre temporal de sus establecimientos, pues la inseguridad se vive cada día entre las calles del municipio.

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Karla Cañizares es una joven emprendedora que comenzó con su proyecto La Flore by KC en el mes de mayo de 2020 en dicho municipio, su propósito fue ofrecer arreglos florales para el Día de las Madres; al ver la aceptación de las personas y descubrir su amor por las flores decidió abrir su establecimiento.

“A pesar de que soy recién egresada de la carrera de Periodismo y Comunicación, me gusta que pueda desarrollarme en distintas áreas, pero por el momento dejé en pausa la carrera para hacer lo que me apasiona, algo que apareció de la nada y que voy a intentar para ver hacia dónde nos lleva”, mencionó.

La emprendedora compartió que al encontrar precios accesibles en la venta de flores, pensó ofrecer el servicio para el 10 de mayo de 2020 en Magdalena, entonces le comentó a su novio la idea y se organizaron para empezar a trabajar. Al acercarse la fecha hizo una publicación en redes sociales y en menos de una hora tenía más de 60 pedidos.

La joven estudió periodismo, pero descubrió su amor y pasión por las flores, con lo que quiso emprender/ Foto: Cortesía | Karla Cañizares

“Ahí fue cuando pensé de dónde iba a sacar tanta flor, pues no podría conseguirla toda en el supermercado, anteriormente trabajé en un negocio de decoración y recordé a uno de los proveedores, era una bodega de flores que posiblemente podía pasar cerca de Magdalena, pues en Sonora no existen viveros para este tipo de flores y tienen que transportarlas de otros lugares”, explicó.

Su primer pedido fueron 600 rosas, Karla no tenía conocimiento del cuidado y limpieza de éstas, pero se tomó toda una noche para averiguarlo. Colocó la compra en la casa de su tía, justamente en la sala y dio inicio a la preparación para hacer los arreglos florales.

“Lo único que quería era salir adelante y vender la flor, nunca imaginé el amor y gusto tan grande que iba a sentir por la flor, vivía en Magdalena en casa de mis tíos y ellos me apoyaron en todo momento. Recuerdo ese día cuando llegó empaquetada y olía muy rico, desde ahí me enamoré y ya no había vuelta atrás, no tenía idea lo que venía”, expresó.

Este año Karla cumplió su primer año trabajando como florista, hacía arreglos solamente en fechas importantes como el Día de las Madres, 14 de febrero, Día de Muertos, entre otros; su tía le ofreció un cuarto para que hiciera los arreglos, pues la gente del municipio preguntaba ansiosa cuándo sería la apertura del negocio.

“La gente me felicitaba por abrir una florería, en ese momento el cuarto donde estaba trabajando no estaba en condiciones, no tenía las paredes pintadas, pero aun así la gente no se fijaba en eso, entonces fue el empujoncito para seguir y las ventas del 10 de mayo de este año se invirtieron en el cuartito”, dijo.

En el mes de agosto de 2021 Karla pretendía inaugurar el negocio que había planeado con anhelo pues es parte de sus sueños más grandes; sin embargo, debido a la inseguridad de Magdalena y el repunte del Covid-19 los planes cambiaron.

La joven estudió periodismo, pero descubrió su amor y pasión por las flores, con lo que quiso emprender/ Foto: Cortesía | Karla Cañizares

“Es algo que tiene mi amor, esfuerzo y hechos detallados en cada parte del local, al ver que inició en la sala de la casa de mi tía y ver ahora mi local es gratificante, pero con todo el dolor de mi alma tomé la decisión de posponer la fecha de apertura. Esperemos que la seguridad regrese pronto a Magdalena y que el Covid-19 baje”, señaló.

Pese a la situación, la gente ha mostrado su solidaridad con la joven, así como también con los dueños de los establecimientos que no han podido reabrir sus puertas por la inseguridad que está a la vuelta de la esquina.

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“Para mí lo más difícil es la distancia porque vivo en Hermosillo, pero mi negocio estará en Magdalena y conozco a gente que es muy entregada y me va a ayudar. Lo hice allá porque se siente como un calor hogareño y para empezar es un buen paso, ojalá que más personas se animen a emprender y no tengan miedo. Si fracasan vuelven a empezar, si eso te llena y te hace feliz puedes empezar en el rincón más pequeño de tu casa”, finalizó.