Los gatos son unos animales de compañía muy peculiares, son prácticamente ingobernables, no son como los perros que acaban haciendo lo que su dueño les indica, acá es al revés, el dueño obedece y hace lo que el minino quiere, son enigmáticos y tienen comportamientos realmente incomprensibles, pero es su naturaleza indómita lo que los hace atractivos.

Han sido motivo de adoración en algunas culturas y siempre se les ha asociado con cuestiones místicas y hasta demoníacas, hay quienes piensan que son malignos y que de alguna manera tienen conección con el Diablo, lo cierto que de todas esas leyendas hay una que llama poderosamente la atención y es la supuesta razón por la que estos felinos sueltan tanto pelo por donde quiera que andan.

La Leyenda del Gato con el Diablo

Esta leyenda inicia luego que una mujer que vivía sola con su bebé y su gato, tuvo que salir de emergencia, pero tenía mucho miedo de dejar solo a su bebé y no podía llevarlo consigo, así que miró a su mascota y le dijo: “Gatito mío, por favor cuida a mi bebé, te prometo que no tardo en regresar”, el gato hizo varios gestos como si entendiera y a pesar de su preocupación la mujer salió de su casa, sin saber lo que iba a pasar en su hogar.

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“Poco después de irse el Diablo se presentó en su casa, al verlo, el gato corrió hacia la cuna del niño y se plantó frente a ella, enfrentándolo sin miedo como bien sabemos, los gatos son los únicos animales que no le temen a este ser tan maligno. ‘¿Qué es lo que quieres? le preguntó el minino y respondió: Vengo a llevarme a este bebé’ y el gato sin titubear dijo que no, porque lo estaba cuidando”, relata el video de Tik Tok de @creepy_datosymas.

Ahí es cuando interviene una de las características con las que cuentan estos animales: La astucia, así que le propone al Diablo el reto de adivinar el número de pelos de su cuerpo y si adivinaba podría llevarse al bebé, pero si fallaba se iría, con la promesa de nunca más volver a esa casa, y solo tendría tres oportunidades para adivinar.

El Diablo aceptó el reto, la primera vez falló porque un pajarito lo interrumpió con su canto, en la segunda fue una ráfaga de viento que entró por la ventana y en la tercera el gato le rozó la nariz con la cara y el propio Diablo estornudó, perdiendo la cuenta y su última oportunidad, por lo que se tuvo que ir sin poder llevarse al bebé, eso sí muy enojado se fue del lugar.

“Se marchó de vuelta al infierno, jurándole al gato que algún día adivinaría cuantos pelos tenía y que su venganza sería terrible. Cuando la mujer regresó a su casa sin saber nada de lo sucedido, besó y acarició a su pequeño y agradeció con caricias detrás de las orejas del minino por ser tan buen niñero. Es por eso que los gatos hasta el día de hoy sueltan mucho pelo todo el tiempo, porque de esa manera el Diablo nunca cumplirá su venganza al no saber cuántos pelos tiene en realidad”, finaliza el video.

La muda de pelo de los gatos

Quien tiene gatos lo debe de saber perfectamente y es un contrato que se firma cuando el minino llega a casa y es que su pelo se podrá encontrar en cualquier parte y eso es totalmente normal, puesto que de forma natural los gatos van renovando su pelaje constantemente para tenerlo en buen estado de salud.

Sin embargo, hay dos etapas del año donde esta muda es más marcada y eso tiene que ver con las condiciones climáticas que van cambiando cada año, con el invierno su pelaje se vuelve más abundante y eso es para protegerse del frío, mientras que en verano éste se aligera para refrescarse, son bien adaptables y ahí el que lo sufre es quien tiene que recoger todos esos pelos por toda la casa.

¿Alergia a los pelos de gato?

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Esto es algo muy común de ver y más cuando se reciben visitas, pues la alergia a los gatos puede generar desde picazón y estornudos hasta problemas respiratorios y, al contrario de lo que muchos piensan, el pelo del gato no es el causante, sino que las personas son alérgicas a las proteínas de la saliva, la orina y la caspa del gato, eso pocos lo saben.

Existen medicamentos muy básicos como los antihistamínicos que liberan a las personas alérgicas su sistema respiratorio y ese molesto congestionamiento o lagrimeo en los ojos puede parar, pero también hay otros tratamientos más eficaces como la inmunoterapia, que básicamente es una vacuna para no tener esas molestias y se aplica mensualmente, aunque dependiendo del medicamento, puede variar su periodicidad.

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