Ante el panorama de casos que se han registrado de coronavirus (Covid-19), en todo el mundo, algunos sonorenses que viven en el extranjero han experimentado de mano propia el miedo de contraer la enfermedad y el pánico que se vive.
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Tal es el caso de Faustino Esquer, uno de los cinco estudiantes de la Universidad Tecnología de Hermosillo (UTH) que realizan sus prácticas en la ciudad de Tenerife, en las Islas Canarias de España, uno de los lugares más afectados en los últimos días por el coronavirus.
En entrevista con El Sol de Hermosillo el joven de 22 años, que cursa la licenciatura de Gastronomía, compartió cómo se ha vivido la situación en el hotel donde está realizando sus prácticas profesionales.
Al menos 2 km de distancia al Sur de la isla se encuentra el Hotel H10 Costa Adeje Palace, donde el pasado martes 25 de febrero se declaró en cuarentena por confirmar casos positivos de coronavirus y aislar al menos mil huéspedes.
“La zona donde vivimos son puros hoteles, en uno de ellos se alojó una pareja de italianos que dieron positivo al coronavirus y dos acompañantes más, por lo que el hotel optó por cerrar”, comentó.
En la declaración del alcalde de Adeje José Miguel Rodríguez Fraga mencionó que el problema es global, no una crisis turística y que se tiene bajo control sanitario, se seguirán mejorando los procesos para que el impacto turístico sea el menor posible pues el sanitario está bajo control.
“Esperaba una reacción rápida por parte del gobierno para que los hoteles tuvieran más precaución y hacer un reglamento para poder controlarlo un poco y no se hiciera más grande todo esto”, añadió Faustino.
En las últimas semanas la isla se vio afectada por un fenómeno meteorológico llamado Calima, el cual mantenía a los visitantes en alerta por las fuertes tormentas de arena los cuales podrían causar infecciones respiratorias que pudiesen confundirse con los síntomas del coronavirus.
“El martes yo fui a trabajar con la idea de utilizar mascarilla y guantes, porque mi trabajo es siempre estar cerca de las personas, después de ver una noticia me impactó y me dio miedo, mi sorpresa fue que al llegar al trabajo nos dijeron que no podíamos usar protección para no alterar a los clientes, entonces nos obligaron a quitarnos las mascarillas y se me hizo muy injusto”, manifestó vía telefónica.
Hasta el momento, los empleados del hotel no han recibido más información sobre el acontecimiento y siguen en la espera de la aprobación del uso del equipo de prevención.
“Te pones a pensar en que estás en un hotel donde se hospedan miles de personas gente que entra y sale todos los días, tienen contacto con el exterior y que no nos permitan usar mascarillas es una privación al derecho”, concluyó.
