Si tú o alguien de tu familia ha presentado síntomas que hacen sospechar de un posible contagio de Covid-19, es probable que hayas considerado realizarte una prueba para descartar cualquier riesgo. En esta situación las personas se encuentran que existen dos opciones, la prueba de antígenos y PCR.
Lee también: “¿Qué debo comer si soy positivo a coronavirus?”, recomendaciones para una dieta saludable
La diferencia entre estas dos pruebas, además de su precio, radica en la técnica que utilizan, el tiempo estimado de espera por los resultados y su precisión, por lo que saber en qué consisten es importante a la hora de decidir cuál de estas es lo más conveniente en tu situación.
Prueba de antígenos, accesible y rápida
Las llamadas “pruebas rápidas” de covid-19 son más accesibles que su contraparte ya que no requieren de equipo tan especializado y pueden tener los resultados en una ventana más corta de tiempo, en unos 30 minutos después de realizarse.
Esta prueba se realiza a través del conocido hisopado de nariz y boca, el cual ya se ha vuelto una imagen familiar durante la pandemia de Covid-19. El proceso se realiza para buscar la llamada proteína N, uno de los componentes del virus Sars-Cov-2 que son detectables.
Es recomendable realizar esta prueba en el punto más alto de los síntomas, que suele suceder aproximadamente tres días después de su aparición. Es en este momento cuando la carga viral en el paciente es mayor y la posibilidad de un falso negativo se vuelve más baja.
Aún así las pruebas rápidas todavía tienen un margen de error mayor que las PCR, por lo que se recomienda realizar varias para comparar resultados y evitar confusiones.
La prueba rápida es tu mejor opción si lo que buscas es velocidad y accesibilidad, o realizar varias pruebas dentro de un mismo grupo familiar.
Prueba PCR, mayor confianza si tienes el tiempo
Esta prueba también requiere de un hisopado nasal y oral, pero esta vez lo que se busca detectar es el propio material genético del virus causante del Covid-19, por lo que brinda una precisión mayor a la hora de reconocer su presencia en el organismo.
Al igual que una prueba de antígenos es preferible realizarla una vez que los síntomas del virus se han asentado y existe suficiente carga viral para aparecer fácilmente en la prueba.
Para este proceso se requiere de un equipo altamente complejo que no está disponible en todos los laboratorios, por lo que también puedes esperar que su precio aumente en comparación con una prueba rápida, además de que el tiempo de espera puede ser de varios días antes de conocer los resultados.
¿Cuándo realizarte una prueba?
La primera razón, y también más obvia, para realizarte una prueba de Covid-19 es cuando se presentan los síntomas relacionados con esta enfermedad, que pueden aparecer de 2 a 14 días después de la exposición inicial al virus.
Las personas contagiadas pueden presentar fiebre o escalofríos, tos, dificultad para respirar, fatiga, dolores musculares, dolor de cabeza, pérdida del olfato o el gusto, dolor de garganta, congestión nasal, náuseas, vómito o diarrea.
También se recomienda una prueba en personas que hayan tenido contacto estrecho con una persona contagiada, esta debe realizarse preferiblemente unos cinco días después del encuentro.