La Navidad está a la vuelta de la esquina y es momento de recordar algunas de las tradiciones originales para recibir a Santa Claus.
Seguramente has escuchado o has asustado a tus primos, sobrinos o hijos, con la historia del carbón cómo regalo de Navidad, un engaño que, en la actualidad, ya no se escucha como antes.
Hay quienes piensan que la magia de la Noche Buena ya no se siente como años atrás y parte de esto se puede deber a que algunas tradiciones ya no están presentes como antes.
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Si no conoces el origen de las tradiciones originales de Navidad, en El Sol de Hermosillo te contamos porqué comenzaron a utilizarse.
Galletas y leche para Santa Claus
En algunas películas y caricaturas navideñas, se puede observar que los padres les dicen a sus hijos que deben dejar leche y galletas cerca del árbol de Navidad para que Santa Claus pueda comer al llevarles sus regalos.
Se piensa que el origen de esta tradición, viene de la mitología nórdica y se extendió en varios países del mundo, principalmente en Dinamarca, Bélgica y los Países Bajos.
Los niños de estas zonas, pensaban que los renos de Santa en realidad eran caballos y comenzaron a dejarles zanahorias para que pudieran comer al llegar a sus casas y dejar golosinas.
Fue durante la época de 1930, que Estados Unidos se encargó de hacer un cambio en la tradición nórdica y los padres les decían a sus hijos que debían agradecerle a Santa por llevar regalos y dejarle un poco de alimento para que tomara fuerzas.
Desde entonces las galletas y la leche se pueden ver junto a los árboles de Navidad en la Noche Buena, incluso algunas personas confiesan que realmente Santa se las come.
En México las familias adoptaron esta tradición, principalmente en la zona norte del país, por su cercanía con Estados Unidos; aunque no es tan común, siempre resulta una bonita ilusión para los niños.
Carbón para los niños malos
Uno de los sustos más eficientes hace unos años, era la simple frase de “Santa te va a traer un carbón si te portas mal”, con estas palabras cualquier niño la pensaba dos veces antes de hacer alguna travesura.
Si alguna vez tus abuelos, tíos o tus papás te dijeron esto y no entendías lo que significaba, debes saber que existe una teoría sobre esta tradición navideña.
En muchos países el uso del carbón es para aquellos niños que durante todo el año se portaron mal y como una forma de castigo, reciben una gran pieza negra que sustituye a un juguete.
Algunas personas piensan que el origen de esta tradición viene desde Holanda, ya que los niños de ese lugar colocaban sus zapatos cerca de la chimenea una noche antes de Navidad.
Debido a otra tradición, en la que se cuenta que Santa Claus baja por la chimenea para poder dejar sus obsequios, se dice que para aquellos niños que se portaban mal no había regalos.
Al estar cerca de la chimenea, Santa lo que hacía era colocar un trozo de carbón dentro del zapato del niño malo, en lugar de dulces y juguetes.
Sea cual sea el origen, resulta muy efectivo para muchas familias, lograr que los niños se porten bien si quieren ver un regalo en su árbol de navidad.
¿Por qué Santa entra por la chimenea?
La razón por la que se dice que Santa Claus baja por la chimenea para dejar los regalos en el árbol de Navidad, se debe a un poema muy antiguo del siglo XIX.
Su autor, era un estudioso que analizaba los mitos acerca de la Navidad que había en todo el mundo y escribió un poema especial para sus hijos.
La historia relataba que Santa Claus llevaba sus regalos en un trineo que era dirigido por renos voladores, por lo que debía aterrizar en los techos de las casas.
En aquel entonces, todos los hogares, en su mayoría, tenían una chimenea para calentarse en las frías noches y este era el acceso perfecto para Santa Claus.
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En el poema se relata que, de un salto, Santa baja por la chimenea hasta llegar al piso y que incluso en algunas ocasiones, sorprendía a los niños que se encontraban despiertos a la espera de sus regalos.
Desde entonces se utiliza como una tradición en algunos países, por lo que, las ideas anteriores se resumen en un mismo circuito:
Santa baja por la chimenea para colocar los regalos en el árbol de Navidad, al lograr bajar, toma un trozo de carbón para el niño que se portó mal y antes de irse a otra casa, come de las galletas y leche que encuentra cerca del arbolito.
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