Originario de Estación Ortiz, Sonora, Francisco Javier Verdugo Ruíz, mejor conocido como “El Tata Chile Bola”, compartió un poco de su historia del teatro y con los medios de comunicación, para El Sol de Hermosillo.
Mencionó que el personaje “El Tata Chile Bola” nació de manera espontánea, pues él jamás pensó trabajar en los medios de comunicación, hasta que María Antonieta Rosas, “La Toñis”, lo invitó a crear un proyecto para radio, donde surgió el nombre de Ruleteando, programa que eventualmente llegó a la pantalla chica.
“Llegue a los medios de comunicación por accidente, jamás imaginé estar acá, yo encantado en la actuación compartiendo créditos con Sergio Galindo, Antonieta Rosas, Irineo Álvarez, entre otros artistas sonorenses”.
El icónico actor sonorense, el cual ha participado en varias puestas en escena, como “Huevos rancheros” por mencionar una, agregó que en busca de un nombre artístico seleccionó las dos primeras letras de sus apellidos Verdugo y Ruíz, para crear Francisco Verú.
“Cuando empecé a hacer teatro, jugando un poco con el asunto de no dejar ninguno de los dos apellidos y que estuviera en el programa de mano, jugué con las primeras dos letras de mis apellidos y quedó como Francisco Verú, mi nombre de actor”, señaló.
Él se describe asimismo como una persona introvertida, pues incluso el exponer en alguna clase, no era una tarea sencilla, pero la pasión por la actuación era más grande que todas esas barreras y optó por seguir sus sueños.
El ya reconocido “Tata Chile Bola”, reveló que para elegir los nombres de sus personajes utilizó la fórmula de Roberto Gómez Bolaños “Chespirito”, es decir, las iniciales de estos, como son con las letras “CH”, creando así a dos de sus más reconocidos personajes: “El Cholo Chilo” y “El Tata Chile Bola”.
“En el momento en el que se planea hacer un programa en medios de la comunicación, les comenté que a mí me gustaría hacer ruido en el radio con personajes y hacer un choque de dos personajes con contextos muy separados, un cholo setentero y un viejito de la sierra, y así nacen “El Cholo Chilo” y “El Tata Chile Bola”, finalizó.