José Llamas fue carpintero de profesión, hace 3 años inició con la construcción de casas a escala, un hobbie miniaturista que adoptó como parte de su vida y donde invierte la mayor parte de su tiempo.
Su inquietud empezó cuando construyó una casa de muñecas para su nieta, desde ese momento diseñó otros estilos diferentes.
Actualmente tiene 10 piezas, que elaboró entre 3 y 6 meses, además el peso es varia entre los 40 kilos las de madera y los 10 kilos las hechas de unicel.
“En las noches es cuando pienso en las ideas, comienzo a hacer trazos, dibujos y después me voy al taller a construirlo, lo que más disfruto de lo que hago es el resultado final”, señaló el miniaturista.
Para José no hay procedimiento difícil al crear las casas, ya que utiliza materiales fáciles de trabajar como el unicel, cartón, desechables y artículos reciclados, así como su experiencia en el manejo de la madera.
“Los estilos que más me gustan son el colonial y las cabañas, también las casas que están a la orilla del mar, conforme voy haciendo las casas hago los muebles, dependiendo el tipo de vivienda”, añadió.
Siempre ha recibido el apoyo de su familia y sobretodo sus hijos reconocen el gran trabajo que hace Don José, “mis hijos me dicen que las venda para que saque dinero pero no quisiera venderlas, pero si llega el momento tendré que hacerlo, todas tienen un valor sentimental porque uno se entrega 100% para hacerlo”, abundó.
Las altas temperaturas que se han presentado en la ciudad no le han permitido permanecer mucho tiempo en su taller, sin embargo considera que en épocas más favorables puede estar hasta el amanecer.
“Me gustaría exponerlas en algún lugar, investigar donde y aceptar invitaciones de algún sitio, pero sobre todo tener un patrocinio porque moverlas es caro”, dijo.
Para finalizar, compartió su satisfacción al realizar su trabajo e invita a las personas de la tercera edad que hagan alguna actividad para distraerse, pero sobre todo disfrutarlo.