El gobierno de México, bajo presión de Estados Unidos, mantiene a los fabricantes de automóviles chinos a raya al negarse a ofrecerles incentivos, como terrenos públicos de bajo costo o reducciones en impuestos, para la inversión en la producción de vehículos eléctricos, indicaron tres funcionarios mexicanos familiarizados con el asunto a la agencia Reuters.
La última reunión entre altos funcionarios mexicanos y un fabricante de automóviles chino fue en enero, dijeron las fuentes, con ejecutivos de BYD, uno de los mayores fabricantes de vehículos eléctricos del mundo.
Te puede interesar: Tesla decepciona en ventas; Xiaomi sorprende con SU7
En dicha reunión, los funcionarios mexicanos dejaron en claro que no darían incentivos como los otorgados a los fabricantes de automóviles en el pasado y que suspenderían cualquier reunión futura con los fabricantes de automóviles chinos, dijeron las fuentes que pidieron no ser identificadas.
Un portavoz de la Casa Blanca dijo que el presidente estadounidense Joe Biden no permitirá que los fabricantes de automóviles chinos inunden el mercado con vehículos que representen una amenaza para la seguridad nacional.
Alrededor de 20 fabricantes de automóviles chinos venden vehículos en México, pero ninguno tiene todavía una planta en el país. Los autos chinos constituyen un tercio de la oferta total de la marca en México.
Las fuentes atribuyeron la medida a la presión del gobierno estadounidense, específicamente de la Oficina del Representante Comercial de Estados Unidos (USTR), para mantener a los fabricantes de automóviles chinos fuera de la zona de libre comercio establecida en el Tratado entre Estados Unidos, México y Canadá (T-MEC).
La intervención estadounidense refleja temores cada vez más agudos de su industria automotriz, sindicatos y círculos políticos estadounidenses de que fabricantes de automóviles chinos como BYD, SAIC, Geely, Chery y JAC pretenden utilizar a México como puerta trasera para vender autos eléctricos baratos en Estados Unidos sin pagar elevados aranceles estadounidenses, ahora de 27.5 por ciento.
Atrapado en fuego cruzado
➡️Únete al canal de El Sol de México en WhatsApp para no perderte la información más importante
México está atrapado en el fuego cruzado entre las dos naciones y mercados automotrices más grandes del mundo. Los fabricantes de automóviles chinos pueden eludir los aranceles estadounidenses estableciendo tiendas en México, siempre y cuando cumplan con las reglas sobre la cantidad de un vehículo que debe producirse localmente. Para evitar los aranceles estadounidenses, los bienes deben tener un cierto porcentaje de ensamblaje y componentes regionales, que varía según el producto y el sector. Al menos 75 por ciento de las piezas principales de los vehículos, como el motor o la transmisión, deben tener su origen en la región de América del Norte.
A pesar de los vientos en contra, los fabricantes de automóviles chinos como BYD todavía buscan echar raíces en México, que busca instalar una planta.