El Foro Urbano de las Fiestas del Pitic cerró en grande su última jornada con la presentación en vivo de Aterciopelados, un grupo que ha dejado una huella imborrable en el rock alternativo en español.

Alrededor de las 10:45 de la noche, Andrea Echeverri y Héctor Buitrago salieron al escenario del Parque la Ruina junto al resto de su banda y desde el minuto uno los miles de asistentes saturaron al grupo con sus muestras de cariño.

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El concierto arrancó con “El Dorado” y “Si no se pudo”, este último tema dedicado a todos aquellos que quieren un cambio en sus lugares que habitan.

La fuerza portentosa de Echeverri abrazó las sensibilidades de todos los reunidos en el Parque La Ruina, con una presentación en la que por casi dos horas no dejaron de desfilar los mayores éxitos de la banda y el mensaje de hermandad que irradian en sus letras.

“Hay que ser lo que uno es, hay que defender lo que uno necesita y hay que, de alguna manera, seguir luchando por la igualdad”, señaló la vocalista antes de interpretar “Cosita seria”, “Antidiva” y “Piernas”, esos himnos del feminismo y del amor propio.

“Yo amo a mi cuerpo, porque puede que no salga bien en las fotos, pero me lleva a todos los lugares y me permite bailar y estar aquí cantando con ustedes”, afirmó Echeverri con esa autenticidad y carisma que ha conectado con varias generaciones.

“Maligno” fue la antesala perfecta para el golpe emotivo de la noche con la interpretación de “En la Ciudad de la Furia”, la legendaria canción de Soda Stereo que alcanzó nuevos horizontes en el disco Comfort y música para volar, la presentación que el trío argentino grabó para el MTV Unplugged de 1996, con Echeverri como invitada especial.

“En Bogotá hubo una época en que explotaban bombas”, recordó la cantante antes de su interpretación. “El narcotráfico estaba super fuerte, Pablo Escobar reinaba y había bombas todo el tiempo. Entonces casi ningún artista pasaba por Bogotá, los únicos que fueron… Mi primer concierto fue ver a Soda Stereo, era hiper mega fan, y de pronto la vida hermosa, complicada, caótica, pero muchas veces asertiva… terminé cantando 'En la Ciudad de la Furia'.. que nos ilumine y nos dé armonía”.

A este momento único en la capital sonorense le siguieron “Luz Azul”, “Dúo”, “Baracunatana” y “El Estuche”.

La banda dedicó “Tu Amor Es” a los pueblos indígenas que están luchando por preservar sus recursos naturales, como la comunidad Comcáac.

“Florecita Rockera”, “Candela” y “La Culpable” fueron los temas con los que la agrupación colombiana se despidió de los hermosillenses, antes de regresar en el encore con “El Diablo”, “Bolero Falaz”, cantada al unísono por todos los presentes y “La Estaca”, el gran cierre de la noche.

Acostumbrados a pelear

Horas antes de su concierto, Aterciopelados platicó con los medios de comunicación sobre la vigencia de la agrupación y ser un parteaguas de la canción protesta y del feminismo en la música de los años noventa, promoviendo de paso otros mensajes de ambientalismo y paz de las comunidades.

“Nosotros somos muy hijos de la canción protesta. Entonces el mensaje del concepto para nosotros siempre ha sido bien importante. Yo estoy muy convencida de que la música sirve para llevar mensajes, acompañar, animar”, apuntó Andrea Echeverri.

“A mí me tocó un mundo muy masculno, por ahí estaba tal vez Julieta [Venegas], pero en general esos Wacha Tours de los noventa eran ochenta hombres y dos mujeres. Entonces hay como mucho repertorio ahí de ponerse como fuerte y en contra del amor romántico, de la idealización de que lo que necesita una mujer es de un hombre y de enamorarse”.

La colombiana destacó que esta identidad alejada del lugar común está arraigada a sus años de juventud en que se revelaba contra lo establecido, así como a la vena punk de los inicios de Buitrago en la música .

“Uno está acostumbrado a pelear, uno crece luchando y defendiendo su lugar, y haciendo entender que lo que a uno le gusta, así no sea lo popular y no corresponda al estereotipo, pues es lo que uno quiere, y hemos construido un lugar de respeto y las cosas han cambiado mucho”.

Echeverri declaró que cada vez hay más espacios de igualdad dentro de la música y otros ámbitos de la vida, pero sigue habiendo camino por recorrer.

“Yo sí tengo mi peleita con las chicas sexys y toda esa cosa del show business que es tan falsa y tan superficial y tan horrible. Hay que ser uno mismo y hay que quererse y hay que aceptarse y no hay que comer cuentos del estereotipo. Cuando uno conoce a una persona bonita, a la semana ya te da lo mismo, lo que importa es el corazón, la paciencia, la energía, la tolerancia, ser buena persona”.

30 años de carrera

Este 2023, Aterciopelados están celebrando 30 años de carrera, y apenas hace un mes vivieron uno de los momentos más emotivos de su trayectoria con su concierto especial en el Palacio de los Deportes de Bogotá por los 28 años de El Dorado, el disco que marcó su carrera y marcó un antes y un después en el rock latinoamericano.

“Estuvo muy bonito sentir que las canciones siguen vigentes, que a ese álbum de 28 años la gente lo recuerda. Y yo estaba esperando que al concierto fuera pura gente grande o de mi edad, treintones o algo así, y había de todas las edades y fue super hermoso. Había gente muy joven, los papás con los hijos y hay ese puente generacional bien chévere”, confesó la vocalista.

La banda ha conectado con varias generaciones de escuchas a través de sus letras que irradian una honestidad vulnerable, pero poniendo la llaga en la crítica social.

“Muchos jóvenes se conectan porque encuentran esos temas, como la música de ahora es más sexual y de fiesta, hay jóvenes que se conectan precisamente con ese otro tipo de música que tiene más profundidad, que tiene más relación con el planeta”.

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Por su parte, Héctor Buitrago señaló que están conscientes de todo lo conseguido en su carrera, siendo una influencia importante para las bandas de rock en español y dejando su nombre grabado con letras de oro en la historia del género en Latinoamérica.

“Sabemos que se ha recorrido un largo camino, que la música ha significado mucho para las personas, incluso algunos momentos de las vidas de las personas están marcados con canciones y álbumes. Es muy bonito lo que nos ha dado la música a nosotros”.

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