Caro Valenzuela es una cantautora hermosillense que con tan solo 20 años ha conformado un cuerpo de trabajo detrás de sí que la ha consolidado como una de las propuestas y talentos emergentes más interesantes a seguir del rock indie/alternativo de esta década.
Su proyecto ha sido descrito como un espacio artístico para sublimar la ansiedad, la melancolía y las emociones fuertes en un viaje musical que transita por varios géneros, fluctuando entre la vulnerabilidad y lo frenético de la existencia.
Ahora, con cinco años en la escena independiente de Sonora, Caro Valenzuela está presentando BLAH BLAH BLAH BLAH!, su nuevo EP con cinco canciones concebidas como la antítesis de su álbum debut Milkshake (2022).
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Y si en su primer disco la línea narrativa conceptual era dirigida por el conejo blanco de Alicia en el país de las maravillas, en su más reciente material discográfico el conejo se metamorfosea en una carreola que funge como el vehículo principal en el cual se van recorriendo cada uno de sus tracks.
“La línea narrativa continúa, es una extensión traída también de una misma crisis existencial”, señala en entrevista la artista.
“Estos cinco tracks recorren esta trayectoria de cinco años y todo está muy conectado, aún cuando en el catálogo del proyecto puedes encontrar un poco de todo, desde pop y baladas hasta el rock y el punk”.
Esta versatilidad la ha hecho colaborar con otros músicos como el sinaloense Daniel Quién, en la ensoñación psicodélica de “Luces De Ti”; y con el compositor de música clásica hermosillense Alejandro Karo, en “Seres”, expandiendo su propio sonido y dándole nuevos matices a su voz.
“El proyecto se enfoca más que nada en brindar una experiencia sensorial al escucha, por medio de shows donde nos presentamos con vestuarios y algo de performance, y en la cuestión auditiva cuidamos mucho esa experiencia de crear un ambiente seguro para sentir lo que las fibras permiten”.
Proyección nacional
Esta disciplina en el desarrollo de la obra de Caro Valenzuela se ha visto reflejado en uno de los actos en vivo más interesantes y originales de toda la escena sonorense, el cual ha llamado la atención de otros grandes del rock en español como Aterciopelados y División Minúscula, a quienes les ha abierto sus últimos conciertos en Hermosillo.
“Cuando te adentras de muy joven a un mercado tan exigente, sobre todo ahora con las redes sociales donde el ojo público está ahí a la expectativa, te quieren encasillar por lo que el mismo mercado quiere vender”, confiesa sin tapujos la cantautora.
“En lo personal sí fue muy difícil adaptarme a eso y sobre todo ponerle una etiqueta a la música que estaba haciendo. Pero de cierta manera siento que si se mira en retrospectiva toda la trayectoria no está tan alejado el hecho de que el proyecto sea tan conceptual como lo es ahora”.
Así, el público de Caro Valenzuela ha crecido exponencialmente en los últimos meses, conformado por una base leal de fans de todas partes del país que se han identificado con sus letras alegóricas a una búsqueda de la identidad, la infancia interrumpida y la ansiedad.
“Mis canciones tienen cierta conexión y todo se fue hilando, y ahora que pasaron los años lo entiendo. Es una mezcla de sonidos, géneros y letras que invitan a una conversación sobre el sentido de pertenencia, que es parte del ser humano el encontrar un lugar suyo. Pero cuando sientes que eres de muchas formas o cosas de pronto te sientes hasta incomprendido en tu misma ciudad, pero en el camino encuentras gente que también se siente así”.
La hermosillense recientemente pudo compartir estas canciones en una segunda gira que realizó en varios venues de Ciudad de México, codeándose en el último año con otras bandas nacionales de rock que junto a ella se anticipan como los grandes actos del género de la siguiente década.
“Realmente estoy muy agradecida del público que tenemos y de que siga llegando. Poco a poco fui ganando audiencias de otras partes que no son de aquí, una vez que nos presentamos fuera fue muy bonito el poder conocer las caras frente a frente y es un sentimiento muy especial”, afirma visiblemente emocionada.
“Me sigue sorprendiendo que la gente se sepa las canciones y conecte con ellas y las entienda, sobre todo porque desde esta trinchera una podría pensar que a lo mejor esto es demasiado abstracto para que la gente lo entienda, que a lo mejor y ni siquiera se capta, pero realmente existe mucha comprensión”.
Con todo, esta conexión no ha sido gratuita, pues Caro Valenzuela destaca también como una de las artistas más cercanas a sus fans y con mayor actividad en redes sociales, haciendo partícipe a sus seguidores con shows especiales que se han presentado como “pijamadas” y un listening party exclusivo que tuvo lugar días previos al estreno de su último material de estudio.
“Me gusta hacer parte de los procesos al público, mostrando qué hay tras bambalinas y compartiendo que todo es picar piedra diariamente. El proceso ha sido construir algo conceptual y el verdadero reto es cómo lo vas a comunicar al público, con qué elementos y con cuáles discursos para que puedan entenderlo”.
Nuevos proyectos
El EP BLAH BLAH BLAH BLAH! también se presenta como un puente conductor hacia el próximo álbum de Caro Valenzuela, quien sigue en el camino junto al resto de su banda para llevar su música a la mayor audiencia posible dentro y fuera del estado.
“Estamos en un punto clave en el que no somos quizás tan desconocidos pero ni tan conocidos, sino que estamos justamente en un punto medio. Pero también estamos en un momento muy gratificante, con nuestro propio equipo que es totalmente independiente, haciendo las cosas por nuestros medios, vendiendo merch y demás para solventar el proyecto. Y el público es el que ha nos ha estado formando”.
La joven cantautora sabe que el rock alternativo de la entidad está viviendo uno de sus momentos con mayor vitalidad en toda su historia, con una gran oferta de bandas para todos los gustos que desde sus respectivos espacios están logrando que más agentes de la escena volteen hacia esta tierra.
“En Sonora existe muchísima diversificación en cuestión artística. El trabajo que nos compete a la comunidad artística y a la gente que le interesa ir a shows es el de poder impactar culturalmente y que esta diversificación pueda tomar mucha más fuerza y que nos siga llenando de orgullo, sin sacar el dedo del renglón”, advierte.
“Si se nos abren las puertas hay que dejarlas abiertas para las demás personas y rodearse de un equipo con el que compartas la misma visión. Hay que conocer otros proyectos, te expande la mentalidad, dejando fuera la envidia y el ego. Si le va bien a uno le va bien a todos”.
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La próxima presentación en vivo de Caro Valenzuela tendrá lugar el próximo sábado 31 de agosto, abriendo el concierto que Daniel Quién dará en el London Pub.
Para más detalles sobre su proyecto pueden consultarse las redes sociales de @carovalenzuelas en Facebook, Instagram y X.
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