En el año 2006 el legendario cantante de música norteña Don Lalo Mora, publicó un disco donde recopila algunos de los corridos que lo distinguieron durante su carrera con los Invasores de Nuevo León, pero para cerrar el disco, decidió guardar un corrido donde le rendía homenaje al beisbolista más grande que ha dado nuestro país.
El tema se llama “El Toro Valenzuela”, un corrido que escribió él mismo para el pelotero sonorense, uno donde describe los orígenes humildes del beisbolista en aquella alejada ranchería del Municipio de Navojoa como lo es Etchohuaquila y sus primeras andanzas de vida en diferentes ciudades del Estado de Sonora.
Luego el corrido se enfoca en su etapa como beisbolista profesional y las cualidades físicas que lo caracterizaban, con ese brazo izquierdo que lo llevó a la gloria deportiva en la década de los 80s y el carisma que tenía con sus aficionados y seguidores, pues siempre, hasta sus últimos días, el Toro fue una persona sencilla y humilde.
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Sin duda uno de los emblemas más fuertes que tiene el deporte mexicano, tal vez para muchos el más grande, y que hizo carrera y vida en esa gran urbe del Estado de California, como lo es Los Ángeles, donde acabó falleciendo y donde ya se está convirtiendo en leyenda del llamado Rey de los Deportes.
Eduardo Mora Hernández, más conocido como su nombre artístico Lalo Mora, es un cantante mexicano del género regional mexicano, que se ha mantenido en la escena musical por más de 50 años, siendo reconocido como uno de los más grandes representantes del regional mexicano como líder y fundador de los Invasores de Nuevo León en 1977.
El Toro Valenzuela
De los llanos de Sonora,
salió el brillante muchacho,
para orgullo de su tierra,
de Etchohuaquila su rancho,
tierra que baño de polvo,
de niño, sus pies descalzos.
Nació en el Valle del Yaqui,
y el valle le dio cariño,
famoso puerto de Guaymas,
donde paseabas de niño,
también celebran tus triunfos,
por Nogales, y Hermosillo.
Dios le dio un potente brazo,
y el cielo le dio una estrella,
yo quise hacerle un corrido,
en el nombre de su tierra,
a ese pitcher tan famoso,
que es El Toro, Valenzuela.
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Un saludo pa' los Dodgers,
y tambien pa' California,
para el rey de los deportes,
que reconocen tu historia,
a mi México querido,
mi recuerdo y tu victoria.
De todos mis compañeros,
con cariño me despido,
a la Ciudad de Obregón,
también le mando un suspiro,
y a la gente de la sierra,
de la cual, nunca me olvido.
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