Tras el fracaso que se tuvo con el Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi), el gobierno federal puso en marcha un nuevo plan, el IMSS-Bienestar, que tiene la misión de otorgar atención médica gratuita a poco menos de la mitad de la población en el país y Sonora es una de las entidades que arropó este esquema.
Durante la "Mañanera" del martes en Palacio Nacional, un total de 22 gobernadores, entre ellos Alfonso Durazo Montaño, firmaron el Acuerdo Nacional para la Federalización del Servicio de Salud, con el que se oficializa la integración a ese modelo, que a decir del presidente Andrés Manuel López Obrador se convierte en el círculo de asistencia médica más grande del mundo.
En abril de este año se dio por cancelado el Insabi, debido a que se presentaron complicaciones administrativas que impidieron que ese proyecto que inició a principios del 2020, justo antes de que llegara la pandemia del Covid-19, tuviera los resultados esperados.
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Falta de medicamentos, largas filas para atenderse de los pacientes, entre otros problemas fueron recurrentes durante los dos años que estuvo vigente, pero ahora la apuesta del gobierno federal es extender los servicios a 53.2 millones de personas que no cuentan con seguridad social en la República.
Son 692 hospitales del IMSS y 13 mil 886 centros de salud los que se disponen en el país para atender a más de dos terceras partes de la población en esas entidades, cuyo intento estiman algunos especialistas, será insuficiente por la cantidad de atenciones que tendrá que brindar el mismo personal del Instituto.
Este proceso consiste en transferir sus unidades médicas y hospitales para que sean operadas por ese nuevo esquema, es decir, que dejen estar a cargo de las entidades y ahora el gobierno federal asuma la responsabilidad de coordinar los esfuerzos de quienes ahí trabajan.
Como parte de los cambios está la basificación del personal de salud que por años ha laborado en esos lugares con contratos eventuales, por honorarios o contratos temporales, para pasar a formar parte de esta estructura ahora de planta.
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En el caso de Sonora la obra prioritaria es el Hospital de Vícam Switch, con el que se asistirá a los integrantes de las comunidades yaqui; ahí se tienen contratados a casi 500 especialistas y se dará puestos base a casi mil trabajadores. Se destinaron 865 millones de pesos para la conservación de unidades y la adquisición de equipo, mientras que el abasto será del 98 por ciento.
El director general del IMSS, Zoé Robleado precisó que, en Sonora, la obra prioritaria es el Hospital de Vícam Switch para los pueblos yaquis. Se han contratado 490 especialistas y se basificará a 922 trabajadores. La inversión es de 865 millones de pesos para conservación de unidades y compra de equipos, cuyo inmueble deberá quedar listo antes de que finalice este año, el cual tendrá una cobertura del 98 % de medicamentos que requieran los derechohabientes.
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