El tirar basura en cactáceas, mutilar, talar árboles y arbustos podría ser considerado como un "golpe a ti mismo" pues en ciudades semidesérticas como Hermosillo no se ha logrado descifrar la forestación.
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El Colectivo Caminantes del Desierto al igual que otros grupos, se encarga de reforestar la ciudad, pero ven con tristeza cómo su esfuerzo es tirado a la basura por otros ciudadanos.
En los últimos días se hizo viral una imagen captada por el fotógrafo y representante de dicho colectivo, Sergio Müller, donde en una plaza comercial de Hermosillo se encontraba un cactus que sus espinas habían sido usadas como ceniceros para las colillas.
Dicha acción fue catalogada por Müller como maltrato, debido a que las plantas son productoras de oxígeno.
Por lo que comparó dicha acción con la acción de un hotel y la agencia de autos que talaron árboles por el bulevar Kino sólo porque "estorbaban" a la fachada de los negocios.
"Hay desarrolladores que desmontan sin los permisos ni los rescates adecuados; empresas que talan árboles por cuestiones de imagen o ciudadanos que deciden talar porque el árbol tira hojarasca o está levantando la banqueta", indicó.
Enfatizó que continuamente reciben reportes sobre agresiones a la vegetación, pero indicó que es necesario que la ciudadanía se involucre para evitar se repitan estos casos, además se sancione a quienes cometan estos actos.
El maltrato es generalizado, no hay una zona donde se exponga más el daño hacia las plantas o árboles, pero hacia el Norte de la ciudad, pasando los bordos es donde últimamente hay más casos de tala de árboles de la especie Palo Fierro, indicó.
La basura o colillas de cigarros en los cactus no es cuestión de estética, explicó, sino que los filtros traen químicos que afectan a las plantas y una planta debe de desarrollarse a su plenitud sin impedimentos.
En lo que respecta a la reglamentación que impuso el Gobierno de Hermosillo, Sergio Müller consideró que aún hace falta complementarla.
"Contamos con un reglamento de ecología donde ya hay un apartado específico que hace referencia al cuidado de los árboles; falta ahora complementarlo con el reglamento de protección y fomento del árbol; desconocemos si se ha aplicado hasta el momento, apenas ha pasado un mes desde que se publicó en el diario estatal", puntualizó.