A través de una misa digital y acompañado por los padres del grupo Manos Unidas por Nuestros Niños, la Arquidiócesis de Hermosillo celebró una oración en nombre de los niños y niñas víctimas del incendio en la Guardería ABC suscitado hace ya 11 años.

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Tras el pase de lista de los niños que no debieron morir en el fuego, el arzobispo de Hermosillo, Ruy Rendón Leal abrió la ceremonia lamentándose por la tragedia infantil más grande en la historia moderna de México.

“Quiero ofrecer la misa por los niños y niñas que experimentaron este terrible acontecimiento, los que murieron, los que sobrevivieron, pido a dios por sus familiares que durante todos estos años sigue su corazón de alguna forma conectado con este acontecimiento”, manifestó.

Asimismo, pidió a Dios porque la justicia pueda llegar a los responsables de tan despreciable acto, todo ello para la resignación y apropiado duelo de los padres, quienes siguen en pie lucha.

“Hago votos para que los procesos jurídicos que están en curso por medio de instituciones y personas que tienen esta competencia se resuelvan con estricto apego a la ley, que la santísima virgen maría de Guadalupe, consuelo y protección de los que sufren, se apiade e interceda por las mamás y papás del a Guardería ABC”, expuso.

Juanita Luna, madre del niño Jonathan, hizo lectura del sagrado misterio que narraba las cartas de San Pablo a su discípulo Timoteo, a lo cual el líder espiritual señaló que Cristo que, como Timoteo, quien era perseguido por el Imperio Romano, los padres deben tener firmeza para afrontar los momentos de duda en su camino.

“Qué más quisiéramos que no experimentar le dolor, el sufrimiento, pero al fin y al cabo ahí está la cruz y cuando sucede esto debemos recordar la recomendación de San Pablo”, puntualizó.