Desde hace varios años, Miguel Ángel López Salas, ha denunciado a través de las diferentes redes sociales y medios de comunicación que la delincuencia de Hermosillo ha estado haciendo sus fechorías a través de ondas electromagnéticas de baja frecuencia.
Dicha teoría ha cobrado popularidad, ya que López Salas ha conseguido informar a un gran número de personas sobre esta práctica, mismas que se suman como víctimas de mensajes subliminales por medio de las bajas frecuencias, mismas que emiten las antenas de comunicación de la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
Señaló que la baja frecuencia es manipulada por un aparato conocido como Motorola Tipo Maestra, el cual es extraído de los almacenes de CFE por parte de los mismos trabajadores y que es entregado a los criminales que han estado operando en la ciudad por más de 30 años.
“El Tipo Maestra es el de subestación, tiene la modalidad de transmitir en alta y baja frecuencia, entonces ésta es una comunicación que se reproduce en el ambiente, en el sonido, choca el ruido con la baja frecuencia y se produce la voz de las personas y tienen una transmisión desde sus casas con estas radios”, manifestó.
El hombre de 40 años de edad explicó que la baja frecuencia provoca que las personas se vuelvan depresivas y vulnerables a diversas enfermedades, tanto físicas como mentales.
Recordó que su madre, padre y hermano fueron víctimas mortales de esas señales y que con él han intentado orillarlo al suicidio, sin embargo, ha logrado superarlo gracias a su conocimiento en el tema.
Además de causarles enfermedades y hostigamientos mentales, aseguró que los delincuentes lo utilizan para el espionaje, es decir, escuchar conversaciones y conocer las rutinas de las personas para robarles.
“Monitorean a las víctimas, entonces las víctimas son hostigadas para provocarles homicidio, y aparte siendo el espionaje en tiempo real, la gente no se da cuenta que son atravesadas con la onda de radio, la finalidad es el despojo de propiedades, se acaban a toda la familia completa, en mi caso a mí me despojaron una propiedad”, abundó.
Para no ser afectado, contó que mandó fabricar una jaula especial de aluminio, la cual la coloca alrededor de su cama para no escuchar voces a la hora de dormir.
“Es una jaula de aluminio, es del tamaño de una cama matrimonial, es malla de aluminio con estructura de aluminio y alambres de cobre que se conectan a una barra de bronce, aterrizada como una mufa a tierra, entonces adentro de la jaula se mide el nivel de electromagnetismo más bajo que afuera de la jaula”, puntualizó.
Comentó que se ha acercado con personal de CFE para hablarles del tema y pedir que se bloquee la baja frecuencia, mismos que le pidieron una lista de los afectados para indagar en el caso.
López Salas calculó que hay más de 100 casos denunciados en Hermosillo y que la mayoría son de colonias como la Piedra Bola y la Olivares, pero que espera que más gente se entere de la situación porque es algo que afecta a todos.