El 14 de octubre de 2021 Hernán Garniel Duarte, encargado de la Estación 3 de Bomberos sufrió de un infarto, en el momento, fue necesario proporcionarle respiración cardio pulmonar y posteriormente una descarga eléctrica, sobrevivió, pero tuvieron que hacerle un cateterismo para desbloquear sus arterias.
Quien este año fuera reconocido como Bombero del año 2024 durante la celebración del Día del Bombero mencionó que previo a esta complicación de salud vivía normal, siendo muy activo y “movido”, por lo que no se imaginaba que había un problema en su cuerpo.
Recordó cómo en la cama del hospital el doctor que le realizó la operación después del infarto le recomendó dejar de fumar, puesto que era malo para su salud, sin embargo, Hernán nunca ha fumado.
El médico le dijo que sus arterias estaban completamente calcificadas, condición que no es reversible, “supe que era por el humo y los contaminantes de este que a lo largo de 20 años en el servicio he inhalado”, comentó el bombero de profesión.
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Desde que pasó a formar parte del municipio en 1986, a la fecha solo se han jubilado tres elementos del Heroico Departamento de Bomberos de Hermosillo, debido a las condiciones tan demandantes que presenta la profesión para sus integrantes, provocándoles problemas de salud e inclusive, en algunos casos, hasta la muerte, por lo que muchos optan por retirarse o encontrar la manera de pensionarse.
Juan Francisco Matty Ortega, jefe de Bomberos de Hermosillo, declaró que la petición para reducir los años de servicio es comprensible ya que el trabajo de los elementos es muy exigente, tanto en la cuestión física por el esfuerzo que se hace y diversos tipos de movimiento que afectan al cuerpo, así como las cuestiones de exposición de ambientes extremos como calores intensos y ambientes contaminantes.
“Entiendo que por la parte gremial están integrando un proyecto de reducción del tiempo laboral a 25 años, el cual es de 35 años para los nuevos elementos y 30 años para quienes estamos trabajando bajo el criterio anterior”, mencionó.
El departamento de bomberos cuenta con elementos que ya tienen bastante tiempo trabajando e incluso algunos que ya están en etapa para jubilarse, destacó, por lo que para las nuevas generaciones esta propuesta será favorable.
Al respecto, Héctor Duarte Tagles aseguró que “indiscutiblemente esta profesión es de alto riesgo, en la que se desarrollan y se exponen los elementos, estos tienen que cuidar desde aspectos de seguridad y su integridad física que pueden concluir en lesiones, caídas, contusiones, golpes, o aspectos más graves como incapacidad motriz y hasta la muerte”.
El profesor investigador de la Universidad de Sonora (Unison), adscrito al Departamento de Medicina y Ciencias de la Salud, explicó que los bomberos se exponen a humos que cuentan con una cantidad enorme de sustancias que se pueden manejar de manera directa en la combustión o de manera indirecta por las temperaturas que provocan que algunos gases se transformen también en el proceso de combustión.
“Los humos de un incendio pueden estar generándose por madera, si fuera simple madera sería más sencillo, pero esta tiene la presencia de ciertas breas que pueden originar hidrocarburos aromáticos policíclicos que si la persona se expone de forma crónica a lo largo del tiempo podría tener ciertos efectos en la salud como son los efectos cancerígenos”, explicó.
La madera contiene tratamientos químicos como compuestos con cianuro para la conservación de esta, el cual tiene la ventaja de que a altas temperaturas se descompone, sin embargo, al principio hay diferentes perfiles térmicos dependiendo de dónde se esté llevando a cabo el fuego.
Barniz, pintura con plomo o cadmio que se usa para darle coloración o pigmentos se atomizan con la combustión y fácilmente pueden entrar por la vía respiratoria al ser inhalados, así estas sustancias llegan a diferentes sectores del tracto respiratorio.
“Si hay un material que por sus características sea inflamable tenemos un desfile muy alto de sustancias nocivas, hidrocarburos, residuos peligrosos, los cuales muchos de ellos son corrosivos y reactivos, incluso metales que pueden oxidarse rápidamente y con la misma combustión ser tóxicos”, declaró.
Duarte Tagles mencionó que hay una gama muy alta de materiales susceptibles a ser inflamables y que a su vez puedan generar una cantidad de contaminantes que van a la atmósfera directa en contacto con los primeros respondientes.
“La petición de reducir los años de trabajo para la jubilación honestamente se me hace muy justa, sobre todo que estamos entrando a un terreno desde la perspectiva de investigador en el área de la salud ambiental, siempre me ha inquietado el tema de bomberos, el cual en otros países se ha abordado profundamente, siendo aquí un tema desierto”, comentó.
Sostuvo que ni las autoridades los han tomado tan en serio como deberían, debido a problemáticas que han tenido en el pasado, entre ellas la más preocupante que ni siquiera se les proporcionaba el equipo de protección personal adecuado.
“Muchos de ellos utilizaban material muy desgastado, siendo que están expuestos constantemente, equipos donados que normalmente no es nuevo y si alguien ya lo desechó en otro lugar es porque ya bajó la calidad de este”, advirtió.
¿Qué se está haciendo?
A pesar de lo desgastante de la profesión, el Departamento de Bomberos no se ha quedado de brazos cruzados en cuanto a la integridad de los elementos se refiere, ya que desde hace 10 años se integró el Departamento de Seguridad y Salud, el cual tiene la finalidad de monitorear su salud física y mental.
Jesús Arreola, quien se encuentra al frente de esta área desde hace tres años, expresó que en forma general el departamento de Seguridad y Salud consiste en ver el cumplimiento de normatividad en materia de seguridad e higiene que aplica para los bomberos y el cumplimiento de tal.
El también licenciado en Psicología con especialidad organizacional especificó que el departamento tiene el objetivo de dotar de equipo y herramienta al trabajador para evitar las lesiones y enfermedades a las que están expuestos los elementos del departamento, además de vigilar tanto la salud física como emocional.
Detalló que las actividades del día a día son cuidar la seguridad del bombero, viendo que cuente con todo su equipo de trabajo, además de las condiciones adecuadas para sus labores, revisando su estado de salud, manteniéndose al pendiente de enfermedades como hipertensión y obesidad.
“A diario se toman signos vitales de los elementos que entran a turno, para ver que vengan en condiciones óptimas para realizar sus actividades, en dado caso de detectar que algún elemento se encuentra fuera de los parámetros normales este se manda al hospital Chávez para una valoración más completa y que se diga si el elemento puede o no desempeñar su trabajo”.
Destacó que, adicional a esto, se cuenta con un programa de valoración física para estar pendiente del desempeño de los elementos del cuerpo.
Para esto, el doctor Roberto Andrés González Fimbres, investigador de tiempo completo de la Licenciatura en Educación Física de la Universidad Estatal de Sonora (UES), lleva a cabo dicho programa llamado “Relación de Mediciones Ultracortas de Variabilidad de Frecuencia Cardiaca con Indicadores Metabólicos en Adultos Mexicanos”.
La finalidad del estudio es encontrar un marcador cardíaco que sea práctico, que se pueda hacer desde casa y que pueda dar información pertinente de cómo se encuentra el estado del sistema nervioso autónomo y avisar de manera temprana si el individuo contará con alguna complicación de salud, de tal manera que se tenga capacidad de prevenirlo.
El acercamiento al cuerpo de bomberos para su participación en este estudio se dio a raíz de que uno de los egresados de la licenciatura se desempeña como elemento del departamento, por lo que posteriormente se tuvo contacto con el área de Seguridad y salud de Bomberos.
Afirmó que, “en este caso, sobre este estudio, si logramos comprobar nuestras hipótesis, va a tener un impacto fuerte en los sistemas de salud y en la prevención de enfermedades de las personas”.
El proyecto consiste en realizar mediciones de frecuencia cardíaca, lo que dice cómo está el estado del sistema nervioso autónomo, información que se relaciona con indicadores de salud de tipo metabólico, particularmente síndrome metabólico, el cual consiste en presión arterial, circunferencia de cintura, glucosa sanguínea, triglicéridos y colesterol.
Además, se mide composición corporal (Dexa), la cual indica cómo se encuentra la masa ósea, masa muscular y masa grasa, además de realizar pruebas de fuerza y calidad cardiorrespiratoria, y añadió que, todos estos indicadores arrojan un estado general de salud, lo que se usa para relacionarlo con la frecuencia cardiaca.
Indicadores de salud actual
Lo que los datos de manera muy preliminar arrojan es que los elementos cuentan con muy buena fuerza y masa muscular, pero también en general con exceso de masa grasa y baja capacidad cardiorrespiratoria, lo que es un predictor de enfermedades.
“Los elementos de bomberos cuentan con un doble riesgo, por un lado, tienen baja capacidad cardiorrespiratoria, alto porcentaje de grasa y alta masa muscular y fuerza, lo que indica que su entrenamiento está basado en un alto volumen de fuerza y poco volumen de capacidad cardiorrespiratoria lo que es un predictor de hipertensión”, abundó.
En ese sentido, afirmó que el departamento de bomberos, en especial el área de Seguridad y salud están muy interesados en evaluar la salud de sus elementos, por lo que ya han detectado algunos focos rojos, y están interesados en establecer parámetros en cuanto a cómo deben de estar sus integrantes.
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Agregó que parte del proyecto también incluye evaluaciones de estrés, sin embargo, hasta el momento no se ha recibido a ningún elemento como sujeto de investigación, no se han empezado a evaluar.
En la “Propuesta de reducción de años de servicio para jubilación y mejoras en servicios médicos profesionales en Bomberos de Hermosillo” de 2017, puede leerse que no existen investigaciones por parte de los servicios médicos o asistenciales de salud sobre las enfermedades que afectan a los traga humos.
En este también se menciona que estas complicaciones en la mayoría de los casos son tomadas como enfermedades comunes o generales, como comúnmente se les llama, siendo que en su gran mayoría se pueden atribuir a este trabajo.
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