El Instituto Municipal de Ecología (IME), busca darle un destino adecuado a las baterías y evitar que sean tiradas en cualquier parte, ya que representan una contaminación al medio ambiente.
Francisco Gil Barraza director del IME, dijo que el año pasado lograron recopilar más de 813 kilogramos de este material con el apoyo de alumnos que eran quienes las llevaban de sus casas a los depósitos instalados en centros escolares del Cobach en Hermosillo y darles un manejo adecuado.
Recordó que de antemano se tiene un acuerdo con Semarnat para el manejo de este material y de esa forma llevarlas al cementerio de baterías autorizado.
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“El año pasado comenzamos con estas acciones en los planteles de Hermosillo del Colegio de Bachilleres, y hoy vamos a darle seguimiento y vamos a reforzar el programa, ya que las pilas deben tener un manejo especial”, expresó.
En ese sentido, añadió que la meta para este 2024 es cuando menos duplicar esa cantidad, por lo que invitan a los estudiantes a llevarlas las baterías de cualquier tipo que ya no utilicen en sus hogares a su plantel del Cobach y de esa forma trasladarlas al cementerio de baterías.
Gil Barraza recordó que se cuenta con un convenio con la Secretaría del Medio Ambiente a fin de que el IME está autorizado para darles el destino final y evitar que la mayor cantidad posible de estos dispositivos queden en la vía pública afectando el medio ambiente.
“Durante el 2023 alcanzamos a juntar 813 kilogramos de pilas, por lo que para hoy esperamos duplicar esa cantidad y ampliar la cobertura en los Cobach, así como sumar otras instituciones este año”, enfatizó.
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Cabe mencionar que de acuerdo a información de ambientalistas en redes sociales, se tiene que las baterías comunes están compuestas por materiales pesados, mercurio, cadmio.
Por tal motivo, el porcentaje de óxido de mercurio en éstas puede llegar al 50% de su peso total, por lo que una vez agotadas y desechadas, seguirán descargando ese mineral a su alrededor.
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