Comercios y prestadores de servicios de Hermosillo han tenido que cerrar o recortar su personal a lo largo de los ya casi ocho meses de contingencia sanitaria por Covid-19 que han dejado una pérdida de empleos de ya casi 40 mil.
Información de la Cámara Nacional de Comercio y Servicios Turísticos (Canaco-Serytur) Hermosillo, señala que no es momento de relajar las medidas y protocolos sanitarios ante el Covid-19, pues los efectos del retroceso en el cambio de color en el semáforo epidemiológico nacional en los vecinos estados de Chihuahua y Durango, que pasaron a rojo y de nueva cuenta sólo operan las actividades especiales.
Esto viene a colación porque este lunes 9 de noviembre, Sonora retrocederá al color naranja, y aunque Hermosillo se mantendrá en amarillo por petición de la alcaldesa Célida López Cárdenas, se agudizarán algunas restricciones, por lo que hay que evitar que sea mayor el impacto económico.
Ario Bojórquez Egurrola, presidente de Canaco Hermosillo, expuso que una restricción en los horarios de apertura de los comercios, representaría una baja en las ventas, lo que causaría el tener que recortar sueldos, menos comisiones, pérdidas de bonos y por lo tanto menos ingresos para el trabajador e incluso más pérdidas de empleos.
Señaló que los especialistas de la salud apuntan que se debe estar preparado para un lapso de entre 18 y 24 meses que se prevé continúe la pandemia por SARS-CoV-2, que seguirá con picos y repuntes, lo que obliga a los comercios a endurecer sus protocolos internos y con sus clientes.
"No nos hagamos porque la responsabilidad de hacerlo no es de un solo lado, al obligar a portar correctamente el cubrebocas, ingresar por tandas, sanitizar constantemente mostradores y las manijas de puertas, los clientes deben entender que es por su propio bien, incluso eso creará mayor confianza cuando nos visiten", enfatizó.
Los negocios que no cumplan con los protocolos deberán ser cerrados temporalmente en lo que subsanan sus ineficiencias, consideró, mientras que las autoridades deben de hacerlo notar al público con motivos de prevención, nunca de represalias y sin exageraciones.
En lo que respecta a los cambios de horarios y aforos, apuntó que deben de ser con mucho cuidado y enfocados a un objetivo, pues ya hay actividades económicas que han sido muy afectadas a lo largo de ocho meses, algunos comercios, incluso han tenido que cerrar y de agua dependían varias familias que hoy no cuentan con un empleo y un sustento económico.
"Proponemos unirnos en una sola campaña integral que involucre a figuras públicas, funcionarios, empresarios, médicos, economistas, músicos, deportistas, líderes religiosos, sindicatos, medios de comunicación para hacer sentir a la población que el cuidarse es tarea de todos, sin distingo de nivel cultural, económico, político o religioso.
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"Llevar el mensaje a lugares públicos con letreros alusivos, se replique en oficinas de gobierno, camiones, parques, taxis, aplicaciones de transporte, salir con una sola voz, con un solo emblema, con un solo eslogan o frase", puntualizó.