Sonora es el segundo estado con mayor superficie con vocación agropecuaria, sin embargo ocupa la décima posición entre los estados que más terreno tiene destinado a las actividades primaría, pero además en 15 años se ha reducido la superficie destinada a este sector productivo y la tendencia amenaza con mantenerse gracias a la virtual crisis que afecta en principio a los trigueros.
De acuerdo a los resultados del Censo Agropecuario 2022 del Inegi, dado a conocer el 13 de junio pasado, Sonora registró un millón 144 mil 269 hectáreas de superficie de uso agrícola, cifra que es 365 mil 843 hectáreas, 24.22% menos que las reportadas en el Censo Agropecuario de 2007, cuando había un millón 510 mil 112 hectáreas destinadas a la actividad.
En materia de trigo, en 2007 se sembraron 270 mil 991 hectáreas y en 2023 destinaron al grano 268 mil 042 hectáreas, con altibajos en el lapso que registró un pico de 320 mil 476 hectáreas en 2009 y un mínimo de de 223 mil 437 has en 2018; aunque la menor cantidad de hectáreas sembradas fue de 104 mil 268 has en 2004, hace 19 años.
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La crisis por los precios de garantía para el trigo que mantiene a los productores bajo protesta, permite vislumbrar una reducción en el área de sembradío, pues si no se logran precios de garantía competitivos, la cartera vencida con la banca comercial crecerá aun más (ya creció 390% en los primero tres meses de 2023), inhabilitando a los campesino para acceder a financiamientos para continuar con su actividad en el próximo ciclo agrícola que comienza en septiembre.
De acuerdo al citado Censo Agropecuario, los principales problemas de las unidades de producción agropecuaria en Sonora son los altos costos de insumos y servicios en un 85.78%; a lo que se suman factores climáticos (51.43%); la baja de precios o disminución de ventas a causa de la pandemia del COVID-19 (30.29%); la inseguridad (26.87%) y factores biológicos (25.41%).
En cuestión de baja en los precios, hay que destacar que los productores de trigo padecen la competencia con los trigueros de Estados Unidos y Canadá donde los granos tienen grandes subsidios y además la apertura de la frontera a granos sin aranceles instrumentada por el gobierno mexicano con el objeto de paliar la inflación, pero sin aplicar mecanismos de apoyo para los productores mexicanos.
En juego la viabilidad del campo
Para Adolfo Banda Duarte, productor del sur de Sonora, presidente de la Unión de Sociedades de Producción Rural del Sur de Sonora, enclavada en Villa Juárez, es la viabilidad del campo mexicano lo que está en juego.
“Esto viene a raíz de la caída de precios mundial y en otros países los productores tienen apoyos, aquí no tenemos ningún tipo de apoyo. Y la caída de los precios viene a redundar en la caída de la economía que va al fracaso, tanto de nuestra familias, somos como 350 familias, entre personas físicas y SPR y esto viene a colapsar la economía familiar”, explicó el campesino que encabeza esta organización que en su conjunto genera alrededor de mil 500 empleos.
A raíz de que nos quitaron los créditos de la Financiera Rural caímos en otros tipos de bancos, particulares, donde las tasas vienen siendo más altas y donde el tipo de garantía es muy diferente a la de la banca oficial. Hasta ahora hemos cumplido pero ahora quien haya levantado siete toneladas ya paga, ocho toneladas con estos precios, apenas cubriría el adeudo, sin tener ganancia, explicó Banda Duarte.
En cuanto a la reducción de la superficie sembrada en Sonora, el productor consideró que posiblemente hay diversificación de cultivos, pero atajó que “lo maravilloso de este Valle es que es 100% triguero porque tenemos las temperaturas y tenemos bien propicios los suelos para el trigo y no podemos meter un valle de cártamo o frijol porque colapsaríamos el mercado”.
En su opinión, la reconversión productiva se puede dar pero a pequeña escala “porque somos trigueros por herencia y por naturaleza, yo soy la segunda generación y hay algunos de la tercera generación que se dedican a producir trigo. Y no se puede producir otra cosa porque colapsaríamos. Si se siembra mucho de algún grano, no habría mercado”.
La insensibilidad del gobierno federal a través de todas sus secretarías que tienen que ver con los agropecuario han venido afectando muy drásticamente el campo y la ganadería, por ejemplo desaparecieron fideicomisos y la misma Financiera Rural, dejando al campo desprotegido y eso se verá reflejado en el próximo ciclo agrícola, consideró.
En lo personal Banda Duarte comentó que tiene en riesgo 150 hectáreas que producen mil 500 toneladas de trigo. A quienes acusan que la protesta es de terratenientes, respondió que “no es que nos venga algo gratis, hemos luchado para mantener las mesas del campo de toda la república”.
Datos duros en Sonora
Con 9.6 millones de hectáreas de superficie con uso o vocación agropecuaria, el estado de Sonora ocupa el 10.9% de la superficie nacional, de acuerdo al último Censo Agropecuario de 2022.
De la superficie de 9.6 millones de hectáreas que existe en Sonora con uso y vocación agropecuaria, 9.5 millones fueron cubiertas por el censo; mientras que, las y los productores declaran 9.1 millones de hectáreas, de las cuales un millón 144 mil 269 has son de uso agrícola que se reparten entre 40 mil 134 unidades de producción agropecuaria.
Ahora bien, las unidades de producción agropecuaria activas son 38 mil 700 y tienen un millón 110 mil 835 hectáreas de superficie agrícola, de las cuales se tiene una superficie sembrada de 648 mil 475 hectáreas y de superficie no sembrada se reportan 462 mil 360 hectáreas.
De la superficie no sembrada 348 mil 345 hectáreas están inactivas por mal temporal, por falta de crédito, por enfermedad, por falta de dinero o falta de apoyos o porque no hubo quien la sembrara, entre otras causas (excepto descanso que son 114 mil 015 hectáreas).
El número de unidades de producción agropecuaria activas ha aumentado, pero el promedio de su superficie agrícola ha disminuido, esto es, en promedio tienden a ser más pequeñas pasaron de 47.1 has por unidad en 2007 a 28.7 has en promedio en el censo de 2022.
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El total de mano de obra en Sonora generado por el sector agropecuario es de 518 mil 082 plazas, de las cuales 404 mil 667 (78.1%) son desempeñadas por hombres, mientras 113 mil 415 (21.9%) por mujeres.
Los productores que trabajan en su unidad productiva son 20 mil 890; sus familiares que también laboran ahí son 31 mil 226; los dependientes de la UP son 89 mil 970; y Jornaleros son el grueso de la mano de obra con 375 mil 996 participantes.
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