Ser maestro es una labor difícil, pero gratificante, sobre todo cuando se brinda ayuda que pocos pueden ofrecer, así como lo hace Ángel Cuauhtémoc Carranza Eredia, quién desde hace 15 años funge como maestro de computación y braille para personas con discapacidad en la Biblioteca Pública Central “Fortino León Almada”.
Sobre cómo termino enseñando, relató que comenzó trabajando como bibliotecario, donde aprendió braille por el maestro Benito, el anterior encargado del área, posteriormente, habiendo aprendido braile y computación, se dio a la tarea de obtener la Licenciatura en Derecho.
Dijo que, aproximadamente en 2009, comenzó a impartir clases de computación, para posteriormente incluir las clases de braille.
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"Cuando inicié a dar clases comencé más como maestro de computación, porque estaba el maestro Benito, él era el encargado de impartir braille, cuando él cambio de trabajo, yo comencé a impartir braille", expresó.
Carranza Eredia manifestó que en el transcurso de su carrera como maestro ha ayudado a aprender en sus clases a más de 40 personas de todas las edades, contando actualmente con 11 alumnos.
Su alumno más joven es un niño que asiste al cuarto año de primaria, en ese sentido, comentó que debe ser más dinámico con los menores, ya que estos aprenden rápido y debe evitar hacer que se aburran.
Sobre su trabajo indicó que, "las clases son personalizadas, ya sea clase de braille o de computación, normalmente no le doy clase a dos alumnos al mismo tiempo, es personalizado, de manera individual".
Mencionó que no es complicado impartir las clases, más bien depende de la persona y el ritmo y facilidad que cada una tenga para adquirir el conocimiento.
El tiempo de enseñanza varía con cada individuo, puesto que cada uno tiene su manera y capacidad de aprender, además de su ritmo y su tiempo para asistir.
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Manifestó gustarle mucho lo que hace, además de sentir mucha satisfacción y mencionó que, "me emociona mucho ver a la mamá, como se emociona cuando ven que sus hijos están aprendiendo, no digo que no aprendan en la escuela, pero muchas veces la mamá no está allá y aquí sí puede presenciar cómo interactúan en las clases, se emocionan mucho".
Para finalizar, hizo un llamado a las personas a buscar e informarse sobre este tipo de clases para quienes lo necesiten, ya que muchas veces no se sabe que existen o que pueden acceder a estas de manera gratuita, y son de gran ayuda para quienes las necesitan.
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