Tras los años de pandemia y el brote de nuevas enfermedades en el Estado, como la viruela del mono, la población de Sonora rompió su esquema y se volvió más sensible ante los padecimientos, aumentando los diagnósticos y disminuyendo la automedicación.
El 2022 fue el año de la nueva normalidad, luego de la apertura de espacios, la realización de eventos multitudinarios, y que las personas volvieron a confiar para estar unas junto a otras reduciendo diversas restricciones de salud, pero no estuvo del todo a salvo de las enfermedades que en algún momento prendieron las alarmas.
El Covid-19, la influenza y la viruela del mono formaron parte del 2022 como aspecto fundamental del monitoreo epidemiológico de las autoridades sanitarias con la finalidad de mantener vigilado su comportamiento con la intención de adoptar nuevas estrategias de salud en caso de que se registraran modificaciones en su desarrollo, como ocurrió por dos años.
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La emergencia sanitaria y los nuevos padecimientos provocaron que los sonorenses se volvieran más precavidos en lo que respecta a su condición medica y de salud, contribuyendo al manejo de las enfermedades a nivel estatal, expuso el alergólo y médico internista, Alberto Monteverde.
El especialista expuso que, quitando el comparativo histórico desde que inició la pandemia, partir del segundo trimestre del 2022 y hasta la fecha, las infecciones de vías respiratorias se han comportado exactamente igual a lo que se tenía antes del Covid-19, pero ahora están haciendo más diagnóstico porque la gente quedó más sensibilizada.
“Antes del Covid si alguien se sentía mal se tomaban un paracetamol y si mejoraban bien y si no pues se aguantaban, pero ahora si tienen síntomas se va al laboratorio, se hace sus estudios de antígeno para influenza, para Covid-19, para virus de infección respiratorio y ya te llegan al consultorio con el diagnóstico hecho de ellos mismos, entonces por eso hemos reportado una mayor cantidad de pacientes con estos padecimientos (Covid-19, influenza, infecciones respiratoria) que antes no se hacían estudios más a fondo, sino que se trataban por gripe, sin embargo el Covid-19 rompió ese esquema”, explicó.
Dejando afuera los datos de los casos de Covid-19, señaló, este año que acaba de finalizar no tuvieron un aumento en el número de infecciones, sí en el número de diagnóstico, pero en cuanto a cantidad de pacientes resultó ser prácticamente el mismo que ya se presentaba antes de que la pandemia empezara.
Sobre el panorama para 2023 y la posibilidad de otra pandemia, resaltó que para evitar una crisis sanitaria como la del 2020-2022, cada país puede tomar sus medidas de precaución tomando en cuenta el comportamiento global de ciertas enfermedades, para que, aún sin tener casos de esas enfermedades a nivel nacional, se puedan ir desarrollando vacunas o los propios protocolos para evitar el contagio masivo.
“Pandemias van a seguir habiendo, pero los gobiernos hacen absolutamente nada para prepararse para una pandemia, sino que esperan a reaccionar hasta que la pandemia ya está encima”, opinó Monteverde.
Explicó que una forma en que los países pueden prevenir pandemias es tomando los datos de los números de caso de estos padecimientos infecciosos que tienen tendencia a subir o a propagarse rápidamente, y generar valor en los laboratorios que se dedican a producir vacunas, desarrollando los biológicos y aplicándolos a la población, para que cuando llegue ya existe una protección general.
Cambios a nivel estatal
Por su parte, para la Secretaría de Salud de Sonora, el cuadro de enfermedades de temporada se modificó tras la integración de padecimientos como el Covid-19 que todavía sigue vigente.
“Digamos que el virus SARS Cov2 se está integrando ya al abanico de virus respiratorios que así como la influenza, que ya la teníamos desde hace muchos años, provocan elevación o enfermedad de insuficiencia respiratoria aguda en la población, por lo mismo, esto lo vamos a estar teniendo”, mencionó José Luis Alomía Zegarra, titular de la dependencia.
En los registros de la curva de contagio del año pasado, solamente algunos días del mes de enero fue donde se percibió un comportamiento parecido al inicio de la pandemia, situación que se fue modificando, mostrando un comportamiento más bien a la baja, hablando específicamente de Sonora, que desde entonces y todos los meses subsecuentes las cifras variaron apenas un poco.
En el último reporte epidemiológico del año, es decir la semana 52 que correspondió del 25 de diciembre al 21 del mismo mes en 2022, la Secretaría de Salud confirmó 174 nuevos casos de Covid-19 y cuatro defunciones.
En la semana anterior a esa, del 18 al 24 de diciembre, fueron 228 casos solamente, y del 11 al 17 de diciembre 254 casos nuevos, que mostraron un comportamiento de una enfermedad de temporada, mencionó el secretario.
“Temporada de influenza, temporada de Covid, ya están ligadas a las bajas temperaturas de la época invernal , la curva epidémica de esta temporada, tanto de influenza como Covid ha sido la de menor magnitud de toda las que hemos tenidos, mientras que por ejemplo ha habido entidades u otras partes en el país donde han tenido una magnitud que ha llegado al 30% de las curvas anteriores, nuestra magnitud aquí en Sonora no pasó el porcentaje de las magnitudes previas, igualmente hemos tenido muy pocas personas que han demandado hospitalización, y no ha habido ningún tipo de saturación”, detalló el funcionario estatal.
Consideró que durante el 2022 han llegado a tener cubierta toda la parte de la atención correspondiente en relación a tanto influenza y Covid, que serán las principales enfermedades ocurran en la temporada.
Además, recordó que cuando la influenza llegó a Sonora, tampoco se tenía mucho conocimiento de cómo contener los contagios, pero al desarrollarse la vacuna y atender los sectores más vulnerables primero, la pandemia del 2009 pudo controlarse, para pasar a formar parte del esquema de vacunación.
Hasta el momento las autoridades de salud de Sonora no han recibido avisos o alertas de nuevas amenazas de tipo pandémico, la Organización Panamericana de la Salud o la Organización Mundial de la Salud no han hecho ningún otro nuevo aviso epidemiológico en ese sentido para este año.
No hay advertencias de Covid-19 este 2023
“En cuanto al panorama para el 2023, la OPS ni la OMS no han realizado ningún tipo de advertencia, pero la secretaría se mantiene atenta para lo que pueda pasar, hasta el momento no sabemos de nuevas crisis sanitarias”, externó el secretario.
Otra enfermedad que prendió las alarmas sanitarias fueron los casos de viruela del mono, o viruela símica, pasando a formar parte de esta vigilancia.
Esta enfermedad que se manifiesta por ronchas en la piel, parecida a síntomas de alergia, y que empezó a trascender en los años 90 como enfermedad endémica de Sudáfrica, se transmite de persona a persona por contacto directo con alguien infectado o por el contacto con heces de una persona enferma, por lo que siempre se ha descrito cómo un padecimiento muy difícil de contraer, pero no deja de ser un peligro pues no hay vacunas disponibles en el mundo, ya que el lote total que existía fue adquirido por el gobierno de Estados Unidos.
Los primeros dos casos de viruela del mono que se reportaron en Sonora tuvieron lugar en Caborca y Puerto Peñasco, en agosto de 2022, sumando solamente cinco casos en total a finales de diciembre.
El titular de Salud en la entidad informó que no se han tenido casos en los últimos 2 meses, “lo que nos confirma que la transmisión cesó, pero eso no significa que no pudiéramos tener algún caso este año, en 2023” finalizó.
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Y esto dependerá de la interacción entre las personas, destacó, pero en Sonora no ha representado una enfermedad que genere algún tipo de afectación a la salud colectiva o salud pública, dijo el funcionario.
Mientras tanto a nivel nacional esta enfermedad acumuló un total de 3 mil 455 casos con cuatro defunciones relacionadas, y a nivel mundial fueron 81 mil 608 casos que reportó la Organización Mundial de Salud (OMS) durante el año, la cual finalmente anunció que renombraron este padecimiento como “mpox”, para evitar estigmatizaciones.
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