Al representar un atentado contra el desarrollo profesional de alumnos y aspirantes a las diversas carreras que ofrece la Universidad de Sonora (Unison) así como a los maestros que trabajan horas sueltas, se hizo público el rechazo hacia el método de enseñanza.
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En al menos tres carreras ya se inició con el modelo, sin embargo de seguir avanzando su implementación impactará a 800 maestros sin base, así como a aproximadamente 33 mil alumnos que están cursando sus materias en la Unison.
Sergio Barraza, líder del Sindicato de Trabajadores Académicos de la Universidad de Sonora (STAUS), mencionó que la reestructuración del modelo educativo rechazó a cerca de 10 mil estudiantes para ingresar a la universidad, lo cual señaló que es injusto.
“La universidad siendo pública y alma mater de nuestro Estado, debe ser una institución abierta para las y los jóvenes de la Entidad puedan ingresar y seguir sus estudios; es lamentable”, sostuvo el dirigente sindical.
Y es que las condiciones en las que se encuentra el alumnado debido a la pandemia ha hecho que al menos 4 mil 500 desertaron de profesionalizarse, debido a que no hay programas de apoyos para mantenerlos en la Universidad.
Lo anterior se debe a los costos que mantiene el plantel educativo pese al periodo de confinamiento, mientras los futuros licenciados o ingenieros llevaron clases virtuales por dos semestres.
Sergio Barraza dijo que de no haber respuesta por parte de rectoría, comenzarán con el procedimiento legal correspondiente.
Estudiantes sin voz
El modelo educativo 2030 propone, dentro de otras cosas, el recorte de horas para los alumnos y alternar clases de manera virtual, lo que a decir de manifestantes de diversas carreras no han sido tomados en cuenta.
Ivonne López García, integrante del movimiento La voz de los Estudiantes, dijo que desde octubre del 2020 esperaban mejorías en las plataformas a fin de que el plan estudiantil se ajustara a la nueva normalidad.
“Estamos cansados de que no se nos contemplen en las decisiones más importantes y decisivas de nuestro futuro en la Universidad”, sostuvo.
Eduardo Granillo, estudiante del cuarto semestre e integrante del movimiento estudiantil, dijo que hay hartazgo por parte de los futuros profesionistas y que no hay respuesta de rectoría.
“Nos han dicho que no sabemos de lo que hablamos, nos ven menos por ser jóvenes pero sólo para lo que les conviene, con el modelo 2030 nos avientan por nuestra cuenta y ahí sí somos muy capaces de ser autodidacta”, dijo.
En tanto, padres de familia, aspirantes que quedaron fuera este año para iniciar una carrera y alumnos inscritos seguirán protestando hasta que se realicen los ajustes en la carga académica.