En las diferentes regiones del estado va en aumento la producción de vino en haciendas locales, lo cual representa un atractivo para quienes gustan de esta bebida para acompañar diferentes platillos o solamente para disfrutar de un rato agradable.
En este sentido y en función de brindar actividades, eventos, festivales y hasta una ruta establecida del vino para su cata en el estado, nace la primera Asociación Vitivinícola de Sonora A.C., la cual ya se encuentra debidamente conformada con fe notarial.
La recién creada asociación, es presidida por Francisco Salazar Giottonini, quien maneja su propia marca de vino que se elabora desde hace 20 años en la Hacienda San Jerónimo, ubicada en la región de Llanos de Guadalupe de Ures, Sonora.
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Por el momento, son pocos los socios que integran la asociación, sin embargo, buscan hacer una mayor promoción a fin de darse a conocer y vaya en crecimiento.
En ese sentido, y como parte de sus primeras labores, es empezar con reuniones de acercamiento entre los socios para fijar una agenda conjunta de trabajo encaminada a la promoción y consumo responsable del vino.
El trabajo de la asociación, dijo, es agrupar y fortalecer el trabajo, para después también pensar en la realización de convenciones, con la idea de mejorar ante la recién constitución de la asociación, sobre todo cuando Sonora es número uno en la producción de uva de mesa, además de que buscarán el apoyo de las autoridades de turismo, agricultura y economía para una mayor promoción.
Recordó que la asociación tuvo sus inicios hace algunos años, sin embargo, debido a la contingencia sanitaria del Covid-19 se quedó paralizada, por lo que de alguna forma están viendo su relanzamiento y promoción.
“Ahorita que vamos empezando de nuevo, los socios que estamos somos pocos, pero contamos con producción de vinos de diferentes presentaciones y estamos en Caborca, Cananea, Santa Cruz, Cajeme y Hermosillo, por lo que hoy la idea es sostener las primeras reuniones para fijar una agenda de trabajo y con el paso del tiempo y planeando eventos locales”, expresó.
El presidente de la Asociación Vitivinícola de Sonora A.C. añadió que con la producción de vino local y las gestiones que se hagan como representante, buscan efectuar a futuro actividades para un consumo responsable de esta bebida, con la incursión de catadores y sommeliers que ayuden a la elección de la mejor botella para la degustación de alimentos.
Adelantó que tienen la intención de participar en dos eventos, uno que se efectuará el 11 de marzo, en San Carlos Nuevo Guaymas y otro en el puerto de Mazatlán, denominado Quinto Festival del Noroeste de Vinos, donde lucirán “Los Vinos de Sonora”.
Como asociación, dijo, tendrán presencia ya que se contará con conferencias ofrecidas por catadores y enólogos con más de 40 años de experiencia y de quienes se debe de aprender para perfeccionar con miras a una mejor promoción.
“Vienen enólogos de formación en Italia, Francia y España, por lo que es un ambiente muy enriquecedor, por lo que ya se está promoviendo entre los integrantes de la asociación”, reconoció.
Al evento acude una gran cantidad de productores locales, estatales y nacionales de vino, con muchos años de experiencia como son los de L.A. Cetto, del Valle de Guadalupe, en Baja California.
Abundó que de la misma forma están por sostener la primera reunión para la aportación de ideas y sobre todo fortalecerse en materia de integrantes, como los hay en Chihuahua, Guanajuato y Jalisco con cientos de socios.
“La idea es fomentar lo que producimos en Sonora con una fusión gastronómica y que se puedan tener mayores actividades locales, aunado a la promoción de la demostración de vinos para aprender a degustar el vino de forma moderada y acompañados de un platillo”.
Producción local de vino de mesa
En materia de colocación en el mercado, dijo que tienen presencia en Hermosillo, Mazatlán Cancún, Oaxaca y otras partes donde han tenido buena aceptación.
Precisó que en ocasiones han logrado sacar de 15 mil a 30 mil botellas en una buena temporada con horas-frío que requiere la uva para madurar, sin embargo, si hay condiciones adversas se baja a unas tres mil botellas, donde aquí se cuenta con una hectárea experimental de casi 20 años y ocho más que tienen una variación de reposición, sin dejar de innovar, aunado a una buena preparación de la planta y la tierra con los nutrientes naturales, así como orgánico y biodinámico.
Dijo que por lo regular se obtienen de cinco a nueve toneladas de uva por hectárea de acuerdo a las condiciones del suelo y climáticas, ya que hay plantas que pueden llegar a producir hasta 24 toneladas, con base a una producción de 10 mil botellas de vino.
En el caso de Sonora, se busca tener una mayor presencia de esta actividad que tiene unos 20 años, pero que en los últimos ocho años ha tenido un mayor realce, sobre todo en las regiones de Caborca, Cananea con la casa de Cuatro Sierras (4-S), Santa Cruz, Cajeme y dos aquí y la Hacienda Los Moreno, aunado a la Costa de Hermosillo que va iniciando y que hoy se han constituido como asociación.
Cabe mencionar que en el caso especial de 4-S, comenzó en 2013 y dos años después se logró la primera cosecha, por lo que actualmente el viñedo está conformado de 27 hectáreas con 12 variedades de uvas a producir y han alcanzado a distribuir unas 100 mil botellas.
Las variedades de vino que se manejan en Sonora son: Blanco, Chardonnay y Verdejo, así como tintos el Carmenere, Petit Verdot, Malbec, Nourvedre, Carignan, Grenache, Touriga Nacional, Syrah, Tempranillo y Cabernet Sauvignon.
Por su parte, Francisco García Káram de la Oficina de Convenciones y Visitantes de Hermosillo, dijo estar de acuerdo con la creación de una ruta del vino, tomando la experiencia de regiones reconocidas en la producción de vino, como es el Valle de Guadalupe.
“La idea es que en un futuro no muy lejano se cuente con este atractivo bien establecido, donde se incluya la visita a los lugares donde se produce el vino para degustar, donde se incluya hasta unas cabañas para quedarse a pernoctar”, expuso.
El representante de la OCV indicó que de antemano el año pasado al efectuarse en Hermosillo el Congreso Minero, como un atractivo para quienes vinieron de otras partes, acudieron en un tours a la Hacienda de vino Giottonini de Ures y la Cuatro Sierras de Cananea, lo cual fue toda una experiencia para los asistentes.
Un legado familiar desde Italia
Desde la misma Hacienda San Jerónimo, donde se produce la uva, se lleva a cabo el proceso, añejamiento y envasado del vino Giottonini, Francisco Salazar comentó que se trata de un legado que le dejó su abuelo de origen italiano y suizo en 1920, quien elaboraba su propio vino al momento de llegar a Sonora.
“De ahí me nació seguir con esta tradición que viene de mis abuelos, por lo que aquí sembramos la uva que ahorita está en temporada dormida, pero a partir de marzo y abril se empieza con la producción para podar en junio, cuando se tiene el brote, mismo que es libre de cualquier sustancia química, por lo que el vino que producimos es orgánico y biodinámico entre vino tinto, rosado y brandy”, expresó.
Tras efectuar una breve muestra de cata de vino y de recomendaciones para su consumo con base a la temperatura que debe de tener, así como los alimentos con los cuales deben de combinarse, además de la demostración del proceso de producción y la cava para el añejamiento correcto en barricas de madera, dijo que todo este tipo de procedimientos se pueden efectuar mediante un proyecto como las tradicionales rutas del vino.
Salazar Giottonini comentó que es importante conocer la variedad de sabores, misma que se adecua dependiendo de la zona donde se realiza la producción de la uva, ya que el 90% del producto está hecho por esta fruta, dando diversos toques al gusto como el Tempranillo, Sauvignon, Merlot, Zinfandel y brandy.
“Aquí hacemos todo con una previa capacitación al personal y cuidando todos los aspectos en las ocho hectáreas que tenemos para que estén libres de químicos, para lo que se han llevado dos cursos de enología que es la ciencia, técnica y arte de producir vino, además de ser técnico para dirigir los procesos de elaboración del vino y supervisión en la bodega tanto la elaboración, el almacenaje, análisis, conservación, embotellado y comercialización”, detalló.
Consumirlo con moderación
Durante los últimos años se ha presentado una tendencia, de alguna forma de moda, en el consumo del vino tinto y rosado.
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El realizarlo como acompañamiento en las comidas es algo saludable debido a los altos niveles de antioxidantes con los que cuenta.
Pero la recomendación es realizarlo de manera responsable con una o dos copas servidas a un tercio de su capacidad, a fin de dejar respirar el producto y para que se tenga la evaporación adecuada y surja la combinación de los olores y sabores.
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