A dos días de cumplirse un año de la detención y muerte de “Genaro”, joven sonorense de 29 años que murió torturado y golpeado en celdas de la Comandancia de Policía de Navojoa, Sonora, madres, esposas, hermanas y demás familiares de los tres agentes policiales se manifestaron en las puertas del Congreso del Estado.
Los familiares de los elementos vinculados a proceso judicial por la presunta detención injustificada, tortura y muerte del joven se mostraron ante el recinto estatal para dar a conocer una serie de supuestas irregularidades en el proceso llevado contra los elementos.
“Los detuvieron por la muerte de un joven que se quitó… bueno, que apareció en las celdas de seguridad pública de Navojoa, donde no hay cámaras, donde no hay ni siquiera algo del mínimo detalle que debe de tener una celda para cuando son recluidas las personas".
"Los están acusando de homicidio simple doloso, tortura y abuso de autoridad y no es justo que los acusen y los encierren sin tener los medios y elementos de prueba para judicializar”, aseguró la madre de uno de los tres policías detenidos desde mediados de mayo del año pasado.
Hasta la fecha son tres los elementos de la Policía Municipal de Navojoa los que se encuentran detenidos debido al caso, agentes quienes, a decir de sus familiares son inocentes.
LOS HECHOS
La madrugada del 2 de mayo de 2018 Genaro Ruiz Arce fue detenido por elementos municipales de Navojoa, esto después de que incomodara a los agentes por grabarlos con su teléfono celular mientras realizaban la detención de un vehículo.
Horas más tarde, los mismos uniformados reportaron la muerte de Genaro en el interior de una de las celdas de la comandancia, supuestamente tras colgarse con las agujetas de sus zapatos.
Esta versión, en su momento fue avalada por el Juez Calificador en turno, por lo que, con una gran dilación, se entregó el cuerpo a sus familiares para que se realizaran sus exequias.
No obstante, las lesiones que presentaba el cuerpo de Genaro alarmaron a su familia, pues no mostraba marcas de estrangulamiento, pero sí muchos hematomas en el cuerpo y demás signos de violencia.
Los funerales tuvieron lugar en medio de una nube de especulaciones y la completa indignación de cientos de sonorenses quienes tuvieron conocimiento del caso, hasta entonces los involucrados se sentían intocables.
Sin embargo, los familiares de la víctima solicitaron una nueva autopsia y la participación de la Fiscalía General de Justicia a fin de que se realizara un procedimiento más completo, lo que dio como resultado una nueva resolución: hubo violación a los derechos humanos del joven.
Tras esto se iniciaron varias investigaciones y se determinó girar órdenes de aprehensión contra los efectivos que participaron de la detención de Genaro, así como del juez calificador que avaló la primera versión de los agentes.