Los funerales de personas que fallecieron por Covid-19 son lugares de alto riesgo de transmisión, es por ello que la Secretaría de Salud creó y dio a conocer un protocolo para este tipo de servicios.
Este protocolo fue diseñado por el área de Promoción a la Salud y Prevención de Enfermedades y propone velar al difunto de manera virtual, aunque los familiares pueden solicitar el servicio en una funeraria o en el hogar.
Las funerarias deberán tomar en cuenta las siguientes recomendaciones: instalar tapete sanitizante en las entradas del lugar, instalar dispensadores de gel alcohol al 70% en la entrada y dentro del lugar, alternar los asientos disponibles para familiares y visitantes, limitar el servicio funerario a dos horas como máximo y colocar información sobre Covid-19 ya sea por medios impresos o audiovisuales.
Se deberá informar a los familiares y acompañantes que el servicio será con el ataúd cerrado y se permitirá el aforo de una persona por cada cinco metros cuadrados, así como también podrán ofrecer el servicio funerario en línea para el acompañamiento de familiares, y no deberá practicarse ningún procedimiento de tanatoestética al cuerpo.
Dicho protocolo también implica recomendaciones para los prestadores de servicios funerarios, su personal, asistentes y para realizar un velorio en el hogar.
La Secretaría de Salud reitera el llamado a continuar con las medidas de prevención e higiene para evitar contagios por Covid-19 y tener en cuenta las recomendaciones de los diversos protocolos que se han presentado con este propósito.
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