La estrategia de seguridad ha tenido un buen desempeño en lo general en cuanto a delitos del fuero común, sin embargo sigue teniendo un pendiente enorme en casos de violencia, aseveró Gibrán Ramírez Reyes, aspirante a la dirigencia de Morena.
De acuerdo con el político, la labor del secretario de Seguridad Pública, Alfonso Durazo Montaño, no ha sido negativa, sin embargo siguen existiendo áreas de oportunidad que varían drásticamente con respecto a las diversas zonas donde opera el crimen organizado en el país.
“Pienso que mucha gente vive tranquila en este gobierno, pero la guerra continúa pues no hemos atinado a encontrar el remedio, ya son dos años, creo que debemos replantear algunas cosas, particularmente creo que una falta que se ha tenido no es el Secretario sino los diagnósticos regionales”, explicó.
Ramírez Reyes sostuvo que no es la misma violencia la que se vive en Sonora que aquella que se vive en Guerrero, pues tienen motivos distintos y están involucradas mafias distintas, así como tramados legales y comerciales diferentes.
Asimismo, el aspirante recalcó que es importante quitarle el ejército de reserva al crimen, mismo que se encuentra en la juventud, a través programas sociales y programas de desarrollo, sin embargo también se debe tomar en cuenta que los problemas ya están establecidos.
Por ello agregó que la autoridades debe tener diagnósticos y programas regionales, pues si bien las estrategias por región son importantes, estas no resolverán ninguna problemática.
Sobre las aspiraciones de Durazo Montaño a la gubernatura de la entidad, Ramírez Reyes manifestó que se trata de una intención legítima, sin embargo, de ser electo líder de Morena, no tendría preferencia con ninguno de los precandidatos.
Dejar de lado las alianzas
Uno de los principios y propuestas que enfatizó el candidato a titular nacional de Morena fue el permitir que las alianzas electorales se decidan a través de una consulta con la base simpatizante y militante.
Ramírez Reyes dejó claro que no quiere que el partido le abra la puerta a otra Lilly Téllez, así como figuras ligadas al gobierno de Guillermo Padrés Elías ni “oportunistas políticos”.
“Tenemos que privilegiar el que sea gente decente y sea gente buena, creo que las alianzas hay que reconsiderarlas, fueron necesarias para sacar adelante la agenda legislativa de la Cuarta Transformación, pero dice Andrés Manuel dice que ya se completó la mayoría de esa agenda”, argumentó.
El político consideró preferible perder algunos espacios de poder que ganarlos perdiendo credibilidad con alianzas indecentes y criticó que, en su paso por Sonora, su rival Mario Delgado Carrillo se rodeara de figuras locales durante su presentación.
Calificó esta actividad como característica del Partido Revolucionario Institucional (PRI) y mencionó que en ese sentido la candidatura de Delgado Carrillo está basada en entramados regionales de poder, a pesar del descontento que tenga la ciudadanía para con estos.