Un costal de boxeo, vendas y un par de guantes formaron parte de la infancia de Alberto Merino Figueroa, quien desde los 9 años de edad comenzó su aventura en el mundo del deporte con la disciplina de boxeo, y que gracias a la enseñanza, amor y dedicación de sus abuelos por este deporte, logró convertirse en un reconocido entrenador de la Ciudad del Sol.
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Alberto tiene 30 años, hace 3 años abrió su gimnasio Fit Boxing Merino, el cual tiene como propósito preparar a niños, jóvenes y adultos para ser peleadores amateurs a través de una serie de ejercicios, acondicionamiento físico, circuitos, fuerza y resistencia, entre otros.
“Este deporte lo practico desde hace muchos años, con mi experiencia decidí poner mi propio gimnasio, comencé a los 9 años, lo dejé y luego volví ya siendo adulto, empecé como ayudante de entrenador y me fui metiendo poco a poco en el deporte, hasta lograr tener mi espacio, aquí entrenamos a boxeadores amateurs y esperemos próximamente tener profesionales”, compartió.
Con pocos costales, pelotas medicinales y mancuernas inició con su negocio, al paso del tiempo fue incorporando otros materiales y se fue adaptando para recibir a más personas, hasta incrementar el número de visitantes.
“El entrenamiento se enfoca más que nada en el acondicionamiento físico, cardio, fuerza, resistencia, se enfoca en peleadores y ese es el plus a diferencia de otros, no sólo es box, son ejercicios sobre tu propio peso con pelotas medicinales y algunas pesas”, explicó.
El entrenador considera que el box es un estilo de vida que conlleva una disciplina estricta la cual te ayuda al momento en el que te encuentras en una situación difícil, ya que enfocas tu fuerza y habilidades en este deporte para salir adelante y crecer personal y profesionalmente.
“El box te da disciplina, yo a los jóvenes amateurs los motivo les doy guantes, les regalo equipo, siempre y cuando presenten buenas calificaciones, eso lo hablo con los papás para motivarlos y que agarren un mejor camino en el deporte del box”, manifestó.
Lo que más disfruta de su trabajo es enseñar box y ver cómo la gente se motiva al ver los cambios físicos y mentales que tienen, asimismo prepararlos para la vida, para que se dediquen su tiempo, esfuerzo y conocimiento en un deporte y no anden en la calles.
“A estos niños quiero guiarlos por el buen camino y que no anden en las calles, quiero que el box sea una enseñanza de los jóvenes que se encuentren en una situación difícil y que mejor volteen a ver el box y vayan creciendo para que salgan adelante”, dijo.
Lo más difícil que se le ha presentado durante estos años de trabajo es la llegada de los “meses malos”, aquellos donde baja la afluencia de gente, por lo que los ingresos para mantener activo se ven afectados y requiere ver otras alternativas para mantenerlo.
“Todos los meses hay meses malos, si no sabes ahorrar es peor, debes de tener una buena administración, en los meses de Semana Santa son muy bajos, a veces ni sale para la renta y con tal de no cerrar el negocio buscas qué hacer, promociones, bajar costos, entre otros”, afirmó.
¿Cómo te afectó la pandemia?
Ante la llegada del coronavirus a Hermosillo, algunos establecimientos tuvieron que cerrar sus puertas para evitar la propagación del virus, asimismo proteger a sus clientes, trabajadores y familia, pero ¿qué protege la economía? Fue entonces que empresarios decidieron implementar algunas estrategias para seguir trabajando y salvar sus negocios.
Alberto manifestó que se vio afectado en muchos aspectos, sobre todo en lo económico pues nunca dejó de pagar los servicios de luz, agua, renta del gimnasio a pesar que éste tiene cerradas sus puertas desde el pasado 20 de marzo.
A través de sus redes sociales ofreció clases personalizadas para continuar generando ingresos, pagar algunos gastos y no perder el gimnasio que tanto esfuerzo le había tomado abrir y mantener en estos dos años y medio.
“Las clases son en casa, sólo voy yo, les facilito manoplas, llevo pesas, pelotas medicinales, les enseño cómo pararse, cómo desplazarse y tirar los golpes, siempre tomo las medidas de prevención, usamos todos cubrebocas, sanitizante y respetamos la sana distancia, no necesariamente tienes que saber, yo les enseño la técnica para que no se lastimen”, comentó.
Diariamente Alberto atendía alrededor de 100 personas en su gimnasio, debido a la contingencia debe hacerlo de manera personalizada y atiende alrededor de 9 personas en distintos horarios. Durante este periodo solo ha recuperado un 60% con las clases a domicilio, ya que en el gimnasio afectó 100%.
Estos años han sido de gran experiencia para el entrenador, pues pese a los problemas no baja la guardia y sigue de pie compartiendo sus conocimientos de box, asimismo considera que ha crecido personal y profesionalmente, ya que cada día aprende algo nuevo, recibe la visita de peleadores de todas partes del mundo y su estado de salud siempre es bueno.
“Estamos tratando de sobrevivir y que no se nos cierre el negocio porque tardamos mucho para lograr llegar hasta donde estamos y no lo queremos dejar caer de un día para otro, entonces a veces nos ponen trabas por no abrir o los horarios pero gracias a Dios hemos salido adelante buscando la manera”, señaló.
Alberto espera que en un futuro pueda reabrir su negocio con las nuevas medidas de seguridad para seguir formando boxeadores profesionales, también recibir niños, jóvenes, adultos y mujeres desde los 7 años en adelante, un espacio para que cualquier género pueda participar y disfrutar del deporte de box.
Las clases a domicilio son de lunes a sábado de 6:00 a 22:00 horas, es una hora de entrenamiento, calentamiento, cuerda, sombra, manoplas, circuitos, acondicionamiento físico y son por todos los sectores de Hermosillo, las clases varían entre 190 a 200 pesos y los requisitos son tener guantes y vendas para seguir con los cuidados de higiene.
Para más información se pueden dirigir al gimnasio Fit Boxing Merino en Aurora #94 esquina con Solidaridad en la colonia Palmar del Sol o bien comunicarse al número 6621793917.